Pinar del Río, acostumbrado como tiene a sus residentes a mostrar indicadores de Salud de los mejores del país, sobre todo aquellos relacionados con el Programa de Atención Materno Infantil, ha creado un observatorio de riesgos sociales que permite a tiempo trazar estrategias e intervenir allí donde las señales apuntan a que las cosas no van bien.
Al cierre de 2021 las cifras del PAMI en Vueltabajo dispararon las alarmas al mostrar una tasa de mortalidad infantil de 9.6 por cada 1 000 nacidos vivos y nueve muertes maternas.
Ante tal escenario se dispuso una serie de acciones para revertir este año tales indicadores, pues según el doctor Yusleivy Martínez Carmona, director provincial de Salud, hay territorios que tienen muy buenos resultados con las mismas limitaciones que Pinar del Río.
El Observatorio fue la primera de estas acciones, radica actualmente en la sección materno infantil y tiene carácter provincial.
La doctora María Teresa Machín López- Portilla, jefa del PAMI en Pinar del Río, explicó que se montó por un equipo de expertos, incluso nacionales, que se invitaron para hacer la estratificación y todo el trabajo de mesa previo.
“De conjunto con el centro de vigilancia y el puesto de dirección, semanalmente se actualiza todo el Observatorio y en función de ellos trazamos las estrategias y las intervenciones en los municipios y las áreas de Salud que nos van dando señales”, argumentó.
La iniciativa, enrumbada junto con asistencia médica y epidemiología, parte de la experiencia en el manejo de la COVID-19 en el territorio, cuando se hicieron los observatorios y las salas situacionales a nivel de policlínico.
“Extendimos esta experiencia ya con diferentes funciones. Como la COVID-19 ha ido disminuyendo, la estamos utilizando ahora para identificar los elementos de riesgo en las áreas socioeconómicas, allí donde predominan la prematuridad, los crecimientos intrauterinos retardados (CIUR) para ir interviniendo”.
Señala la doctora que gracias a estos estudios han podido conocer que el 25 por ciento de las embarazadas tiene riesgo de CIUR y un 15 por ciento de prematuridad.
“En la base de datos provincial, llamada gestograma, que es donde están registradas todas las embarazadas, se hace una identificación de riesgos. Trabajamos sobre todo en los concernientes a la prematuridad, a los riesgos asociados a la hipertensión y al crecimiento intrauterino retardado. Son los que más se han podido ver en el Observatorio y gracias a él se puede saber dónde es que tenemos que intervenir para modificarlos”, señaló la jefa del programa.
Agregó que dentro de las condiciones socioeconómicas identificadas como más preocupantes están las madres de menos ingresos per cápita, las que tienen malas condiciones de la vivienda y los lactantes que no tienen cuna o colchón. “En base a eso hacemos intervenciones intersectoriales de conjunto con el Gobierno y hoy ya se da una respuesta a esos casos”.
OTRAS MEDIDAS
El doctor Yusleivy Martínez Carmona, director de Salud, especificó que, en aras de mejorar la atención a las embarazadas, un grupo importante de ellas almuerzan y comen en comedores de empresas, los hogares maternos establecen contratos con las cooperativas, la ANAP hace donativos de alimentos y se prioriza la entrada de leche a estas instituciones.
Por otra parte, puntualizó que un equipo de ginecobstetras comenzó un recorrido por los municipios, cuyas acciones van encaminadas a evitar el parto pretérmino, el bajo peso al nacer (indicador este en el que Pinar tuvo muy buenos resultados el año pasado) y a minimizar riesgos asociados a la hipertensión arterial y la diabetes mellitus.
Una última acción se corresponde con la implementación de una aplicación móvil, de conjunto con Geocuba, que permite desde los dispositivos ubicar a las gestantes una vez que se les hace la captación. Cada médico actualiza en la APK nombre, dirección, edad y riesgos que la paciente pueda tener.
A la par, y en medio de las limitaciones que hay relacionadas con los medicamentos e insumos médicos, se garantiza en las farmacias municipales un stock de medicamentos para las gestantes.
El primer trimestre de 2022 cerró con una tasa de 6.9 por cada 1 000 nacidos vivos y no hubo muertes maternas, a pesar de que dos de ellas estuvieron reportadas de grave.
Es compromiso de los trabajadores de Salud transformar los números y responsabilidad de cada familia de contribuir con ello. En el balance de Salud realizado ya hace unos meses atrás, se definía esta situación para los pinareños como “un problema de dignidad”. Martínez Carmona expresó: “Debe ser revertida, primero por la salud de nuestros niños y después por la satisfacción de los padres y las familias pinareñas. Cuando en un territorio el PAMI tiene buenos indicadores todo lo demás está bien, porque demuestra dedicación por parte de médicos y familiares. Este es hoy el mayor reto que asume la provincia”.