La ciencia cubana ha demostrado a raíz de esta pandemia de la Covid-19 el talento e ímpetu de sus investigadores. También ha subrayado la intención del gobierno cubano a lo largo de los años de fomentar esta esfera y mantenerla al nivel del de los grandes institutos y farmacéuticas internacionales que lideran el mercado.
Por más que parezca reiterativo, el éxito de Cuba de tener en estos momentos tres vacunas más otros dos candidatos en proceso de desarrollo y aprobación, es extraordinario si ponemos sobre la mesa que somos una isla subdesarrollada en el Caribe, y que no somos una potencia ni europea ni asiática, y encima, sin un bloqueo norteamericano.
Aquí, desde que empezaron a ponerle cabeza a la cuestión, se pensó en hacer un preparado que ya estuviera probado y fuera efectivo en los niños, y además otro que sirviera como una dosis de refuerzo, cosa que no sabemos si la reactivación será necesaria de por vida, puesto que han salido a relucir nuevas variantes más contagiosas del SARS-CoV-2.
Durante los últimos meses la situación epidemiológica en todo el territorio nacional no ha sido fácil, por el contrario, picos bien preocupantes han ido despuntado en Matanzas, Ciego de Ávila, Cienfuegos, La Habana, Sancti Spíritus, Camagüey, Pinar del Río, por lo cual son miles de convalecientes quienes necesitan de un empujón para sus anticuerpos.
Para quienes ya estuvieron positivos a la Covid-19 existe la Soberana Plus, está demostrado su valor para estos casos que no necesitan de todo el ciclo de vacunación, aunque es de aclarar que, los que hayan tenido síntomas leves y en ese momento no hayan sido diagnosticados con el virus, más los que tuvieron que interrumpir el ciclo, sí lo llevan desde un inicio.
Soberana Plus: “¡Más vacunas por la Vida!”
Así desbordó su alegría, Dagmar García Rivera, directora de Investigaciones del Instituto Finlay de Vacunas, al hacerse público la decisión de la Autoridad Reguladora de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos para hacer válido el uso de emergencia de Soberana Plus en los convalecientes mayores de 19 años. “Esta decisión se sustenta en los resultados de seguridad e inmunogenicidad en ensayos clínicos”, aseguró.
Sobre esta vacuna cubana García Rivera puntualizó varios datos de interés:
- “Una sola dosis de Soberana Plus es suficiente para reestimular la inmunidad que se desarrolló como consecuencia de la infección natural. Es además muy segura, a pesar de administrarla a personas que se han enfermado.
- Las evidencias demuestran que los niveles de inmunidad que se alcanzan deben ser capaces de proteger contra la delta, porque se incrementa significativamente la neutralización viral de esta variante.
- Debe esperarse mínimo dos meses para la vacunación. Hay que considerar que la infección por el virus constituye un estímulo para el sistema inmune y es preciso darle tiempo a la respuesta inmune que esta infección estimula, para después vacunar. Si pasó la enfermedad recientemente no se apure, espere los dos meses que las vacunas estarán disponibles.
- No se preocupe si ya pasó la COVID-19 hace tiempo. Los resultados del ensayo clínico demuestran que los convalecientes con más de cuatro meses de haber padecido la enfermedad, responden mejor. He aquí otra evidencia de que los estímulos antígenos requieren tiempo entre ellos para una mejor respuesta.
- Si cree que tuvo COVID-19, pero nunca fue confirmado, aun si tuvo alguna sintomatología leve, haga la pauta completa de vacunación de tres dosis porque puede no ser suficiente una sola dosis para usted. Esto lo está recomendado el Minsap en las indicaciones para la vacunación.
- Si recibió alguna o algunas dosis de vacuna y después se enfermó, no se apure, espere al menos dos meses para vacunarse con Soberana Plus, así será mejor la respuesta.
- Si es convaleciente y está embarazada, puede vacunarse. Están completados los estudios de teratogénesis sin evidencias de efectos dañinos sobre la reproducción y el autorizo lo aborda. Es una ventaja posterior para el bebé pues a través de la lactancia podrá recibir anticuerpos”.
Por último, la investigadora cubana aclaró: “¡Ojo! Los niños convalecientes aún no se vacunan. No están listas aún las evidencias de vacunación en los pequeños que se nos enfermaron. Trabajamos en ello, pero hay que ser muy responsables antes de proponer su esquema de vacunación”.
La directora de Investigaciones del Instituto Finlay de Vacunas “espera ayudar al maratón de dudas que se generan en la población. Juntos, vamos a seguir empinando esta curva”, curva que está más próxima a llegar a su fin en este año ya que hoy día Cuba cuenta con todas las dosis necesarias para inmunizar a toda su población. ¡Cuba Vive, Cuba es grande!