Varias de las comunidades dañadas tras el paso del huracán han sido centro de las ferias por la Salud, unas jornadas en las que los trabajadores del sector realizan acciones de promoción de higiene y epidemiología y también de asistencia médica.
Galafre, Río Seco y La Coloma, son ejemplos de ellos, y esta última recibirá, a partir de ahora, los servicios de proyección comunitaria con frecuencia quincenal, un reclamo de sus pobladores, según precisó el doctor Yusleivy Martínez Carmona, director provincial de Salud.
Añadió que Salud se empeña en mantener la asistencia médica en todas sus instituciones, avanzar en las labores de recuperación en los centros que se perjudicaron y sostener la estabilidad epidemiológica de la provincia.
Para ello, puntualizó, se trabaja en el control de la cloración en todas las fuentes de abasto, al inicio y final de las redes, así como en los llenaderos de los carros cisternas, y se garantiza la cobertura de hipoclorito de sodio en la red de farmacias de la provincia.
Los inspectores de Higiene revisan también los centros de elaboración de alimentos y dejan evidencia y recomendaciones para evitar enfermedades diarreicas agudas por intoxicación alimentaria o enfermedades de transmisión hídrica. Además, se mantienen las labores de control hacia las arbovirosis.
De las 841 unidades asistenciales se dañaron por el embate de Ian 319, lo cual representa el 37.9 por ciento de los centros de Salud de la provincia y 65 ya están recuperadas. De los 205 consultorios médicos que sufrieron perjuicios, 49 fueron reparados y un grupo importante se mantienen reubicados en locales de la comunidad como cooperativas, centros estatales y hasta en hogares, informó Martínez Carmona.
Los centros provinciales mantienen la totalidad de los servicios a la par que mantienen las acciones constructivas y de recuperación.