A pocas horas de cumplir 19 años de edad, Alejandro Parada se colgó la medalla de oro en el salto de longitud de los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe, y lo hizo por todo el equipo de esa disciplina y en especial, Maykel Massó.
Todavía no me repongo de lo que pasó con mi ídolo, aseguró conmovido por la lesión de Massó- favorito en la competencia-, que obligó a su traslado a un centro sanitario en San Salvador, y su regreso a Cuba.
Es muy doloroso para mí ver un atleta de su nivel en esa situación; me desestabilizó pero gracias a la lluvia logré despejar en aquel momento y poner la profesionalidad por encima de lo que estaba pasando, explicó el debutante en esta lid multideportiva regional.
Massó me ha impulsado e inspirado a llegar hasta donde estoy, detalló Parada, quien se sobrepuso al impacto por lo ocurrido y a una lluvia persistente propia de esta época del año en la capital cuscatleca.
Alejandro brincó hasta los 7.88 metros (m), marca conseguida en su quinta oportunidad; “lo mejor que pude hacer ahora y estoy contento con el resultado”, apuntó el subcampeón mundial juvenil en 2022.
Fue muy difícil competir así y me daba miedo lesionarme, pues quiero participar en los compromisos venideros, refirió el responsable de lograr el título para la mayor de las Antillas en ausencia de su compañero.
Y para ello tuvo que armarse de empuje en el estadio nacional Jorge “El Mágico” González, de esta ciudad.
Yordan Turner, de Jamaica, logró la plata con 7,65 m; en tanto Tristan James, de Dominica, se agenció el bronce con igual registro.
De ese modo, el cubano aportó la segunda corona del atletismo para su delegación en la cita centrocaribeña, pues la primera había llegado minutos antes gracias a Zurian Hechavarría, en los 400 metros con vallas.