Alistan colegios electorales especiales en Pinar del Río

Alistan colegios electorales especiales en Pinar del Río

Foto: Januar Valdés Barrios

En los dos habilitados en el hospital general docente Abel Santamaría Cuadrado se chequeó el funcionamiento de los sistemas previstos para garantizar el proceso del domingo venidero, así como los aspectos organizativos y de aseguramiento.

   Esa institución sanitaria constituye la de mayor capacidad en Cuba, al disponer de más de mil camas y superar los tres mil trabajadores.

    De ahí que esos colegios electorales sean de gran importancia, pues posibilitarán ejercer su derecho al voto a pacientes ingresados, acompañantes y trabajadores que estén de guardia, aseveró Miriam Barrera, presidenta del colegio electoral número cinco. 

   Por su parte, Arelis Vargas Maqueira, presidenta de la comisión electoral de la circunscripción 186, del consejo popular 10 de Octubre donde está ubicado el «Abel Santamaría», aseguró que se encargarán de recoger la información el día 25 y a su vez procesarla a la comisión municipal.

   Otros dos colegios especiales radicarán en el hospital clínico quirúrgico León Cuervo Rubio y en la terminal de ómnibus provincial, a los cuales podrán acudir los electores que se encuentren fuera de su zona de residencia por diferentes motivos.

   El municipio de Pinar del Río contará con un total de 321 colegios electorales y de ellos tres estarán en viviendas particulares, enclavadas en sitios alejados de la capital provincial.

   Dada la situación energética, en la prueba dinámica se aseguró, además, el funcionamiento de los grupos electrógenos para garantizar el procesamiento de la información en los diferentes lugares. 

   Asimismo, el ejercicio de esta jornada permitió comprobar los recursos necesarios para la votación, la transmisión de datos, el flujo informativo, así como la transportación.

   Considerado por muchos expertos el código de los afectos, el texto que se someterá a referendo popular el día 25, entre otras disposiciones, reconoce y protege a los sectores vulnerables de la sociedad, los derechos de los adultos mayores y el parentesco por afinidad. 

   De igual modo, ofrece un tratamiento intencionado contra la discriminación y la violencia en el espacio familiar.

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