Los efectos que deja hoy la compleja situación económica internacional, agudizada para Cuba por los daños del criminal bloqueo que sostiene el gobierno de Estados Unidos, sumado al enfrentamiento de la COVID-19, nos obligan como nunca a elevar el control y el ahorro sobre los portadores energéticos desde todas las aristas.
Esa valoración se hizo en la última reunión ordinaria del Buro Provincial del Partido en la provincia Pinar del Río, en la que se coincidió en la necesidad de elevar la exigencia partidista hacia las administraciones y organizaciones de masa, estimulándose de igual manera el uso de la energía renovable.
Ante la actual coyuntura, incrementar las acciones de control es vital para el funcionamiento de los CDR y FMC, pues ambas organizaciones pueden contribuir en alcanzar niveles inferiores de consumo en el sector residencial, mientras que la CTC y sus sindicatos y la Anap su mirada tiene que estar dirigida hacia los colectivos laborales y estructuras campesinas, en las que hay muchas potencialidades para reducir los gastos de electricidad, combustibles y demás portadores energéticos.
En este sentido, el Buró también llamó a los medios de difusión masiva en el territorio a desempeñar un papel más activo y eficiente, encaminado a crear una cultura más sólida en nuestra población, principalmente en niños y jóvenes, ante la necesidad que tiene la nación de velar por el uso racional de sus recursos.
A la Onure, entidad encargada de supervisar el uso de los portadores energéticos en el sector estatal, se le solicitó más protagonismo en el cumplimiento de sus funciones, fundamentalmente a la hora de hacer valer las medidas disciplinarias que cada infractor lleva.
El organismo partidista reconoció que el Consejo Energético Provincial funciona con avances sostenidos, sin embargo, precisa influir mucho más sobre sus similares municipales, sobre todo en la preparación de sus miembros, en la información diaria del consumo y en el rol que deben enfrentar las organizaciones de masa.
Se supo que las ventas de combustible muestran actualmente un lógico decrecimiento, dado por los efectos de la COVID-19, tanto al portador privado como el estatal.