Las luces del centenario Teatro Milanés de Pinar del Río, encenderán hoy para iluminar al elenco del Ballet Nacional de Cuba que arriba al cierre de sus presentaciones en la más occidental provincia de Cuba.
Desde el pasado viernes el conjunto protagoniza las noches de la urbe vueltabajera con un programa marcado por clásicos del repertorio internacional, entre los cuales figuran fragmentos de las obras Coppélia, El lago de los cisnes y Cascanueces, en las versiones coreográficas de la prima ballerina assoluta Alicia Alonso.
Dirigida por la primera bailarina Viengsay Valdés, la compañía acaparó los aplausos del público tras la puesta en escena de piezas como Rítmicas, de Iván Tenorio, la cual articula la técnica académica con bailes populares y tradicionales cubanos, así como la obra Carmen, de Alberto Alonso, que arriba este año al 55 aniversario de su estreno.
Destacaron también en la selección títulos como La muerte de un cisne, del francés Michel Descombey y las coreografías Invierno y Dueto de Ely Regina Hernández, al tiempo que resaltó el elenco integrado por los Primeros bailarines Sadaise Arencibia, Anette Delgado y Dani Hernández.
Asimismo, encabezó la nómina Yankiel Vázquez, y los noveles artistas Daniela Gómez, Amanda Pérez, Estefanía Hernández, Gabriela Druyet, María Luisa Márquez, Diego Tápanes, Darío Hernández, Ányelo Montero, Marcel Gutiérrez y Yunior Palma.
Con un aforo de poco más de 500 personas, el Teatro José Jacinto Milanés nació en el mismo año que abrió sus puertas oficialmente el Gran Teatro de La Habana, hoy Alicia Alonso (1838), y se distingue como símbolo cultural y arquitectónico de la isla, en especial de la ciudad que lo acoge: Pinar del Río.