A la memoria de Ramón Echevarría
Julio Quiala Frómeta, conocido por Billo, se destacó como lanzador y receptor, derecho. Nació el 16 de junio de 1940 en el central Preston, ya fallecido. En 1957 integró, como lanzador, el elenco juvenil de su pueblo. Tenía buena velocidad y condiciones para convertirse en un estelar del montículo.
Un día de ese año, en un partido contra Mayarí, lanzaba con descontrol, el director conversó con él, se pusieron de acuerdo y se anunció el cambio: Quiala pasó a la receptoría y Jesús (Chúa) Cuza entró a lanzar.
Desde entonces no abandonó esa posición, se convirtió en el mejor receptor defensivo de Oriente y uno de los buenos del país, mientras que Chúa fue un destacado lanzador en la región de Mayarí. En 1958 Quiala participó con el Tigres de la Marina en el Campeonato Interno de Nicaro.
En 1961, Quiala integró la nómina de los Mulos de Nicaro, donde se destacó e integró el seleccionado Mineros que participó en la Serie Regional Oriental. Fue fundador de las Series Nacionales como receptor de Orientales, junto con Ramón Hechavarría y César Torres. Al concluir el evento fue convocado al entrenamiento de la preselección nacional con vista a los IX Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe de Kingston, Jamaica 1962, y finalmente fue invitado a la lid como receptor de prácticas.
Desde entonces, y durante casi toda su carrera deportiva, la suerte lo llevó a coincidir en tiempo y espacio con Hechavarría, un destacado bateador con notables cualidades defensivas, a quien tuvo que ceder el puesto principal, pero los directores no lo dejaban fuera de las nóminas porque lo sabían un maestro detrás del plato.
Participó en quince Series Nacionales y militó en el conjunto Orientales de la VI temporada (1966-1967), que destronó a Industriales y se convirtió en el primer equipo de ese territorio en proclamarse campeón nacional.
También estuvo con el Mineros de Roberto Ledo, que en 1972 discutió el título en play off con los Azucareros. En 1975 formó parte de las Avispas Negras de Oriente que ganaron la primera Serie Selectiva, a las órdenes de Pepín Carrillo, quien había sido su directorcon los Mulos de Nicaro.
Fue compañero de batería de Braudilio Vinent, cuando el Meteoro de la Maya implantó un récord nacional en juegos ganados (19). Después de la división político-administrativa de 1976, compitió con las primeras escuadras de Holguín en Series Nacionales.
Se retiró en 1981, para dirigir seleccionados de primera categoría en el municipio Mayarí y fue auxiliar de dirección de Holguín en las Series Nacionales.
(Con documentación de Enciclopedia Biográfica del Béisbol Cubano (Tomo III), EcuRed, Norton Lorenzzi Véliz, Papo Duarte, Calixto González, José A. Jardines Díaz, Guías de las Series Nacionales y otras fuentes).