Heroilde Guilarte Romero es chofer de una de las 56 rutas establecidas en la Empresa Provincial de Pasajeros por Ómnibus de Pinar del Río,y ya perdió la cuenta de las alternativas e inventivas de cara a no detener un servicio vital para la población, que siente en carne propia los efectos del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos hacia Cuba.
Durante casi 40 años ha laborado en esa entidad, y gracias a los conocimientos y experiencia adquiridos, integra allí la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (ANIR), un movimiento que cada día intenta aliviar el impacto de ese muro que supone la política genocida del vecino del Norte.
“He recuperado vehículos que no tenían solución por falta de partes, piezas y agregados, y que los años de explotación han deteriorado”, aseguró a la Agencia Cubana de Noticias quien ostenta la distinción 8 de Octubre, conferida por esa organización en reconocimiento a su quehacer.
Adaptación de compresores, motores, bandas de freno, hojas de muelles y fabricación de mucho de lo demandado en la Empresa figura en la larga lista de resultados de Guilarte Romero, que desde hace nueve años conduce un vehículo «sacado del fondo del mar»-como califica-, pues requirió de gran esfuerzo debido a su estado.
“El bloqueo es una realidad, nuestra principal limitante; quizás en algún momento hemos podido contar con determinada pieza, pero ha requerido modificaciones para llevarla a la medida que necesitamos”, apuntó.
“Aun cuando en la Empresa se han podido recuperar algunos ómnibus en lo que va de año, solo 40 prestan servicios hoy de los 133 que conforman el parque vehicular, debido en su gran mayoría a la carencia de neumáticos y baterías”, refiere Tania Caridad Márquez Alfonso, especialista principal en uso racional de la energía.
Dedicada a la transportación de pasajeros en toda la provincia, y a algunos viajes a La Habana, esa entidad traslada a unas 24 719 personas como promedio diario, y «sufre» las consecuencias de la medida imperialista que por más de seis décadas ha lacerado el desarrollo de la nación.
“Algunos de los carros que van a los municipios refuerzan en las mañanas la ruta seis”, acotó Márquez Alfonso, una de las más utilizadas por los pinareños en la ciudad capital.
“Ninguna ruta se encuentra al ciento por ciento actualmente, pero hemos priorizado los horarios que más inciden en la población”, señaló.
