Con un plan total de 41 976 hectáreas, la campaña de siembra de frío en los cultivos varios marcha de manera favorable en el territorio, a pesar de las dificultades con la energía, el combustible y los insumos.
De acuerdo con Ortelio Rodríguez Perugorría, subdelegado en la Delegación Provincial de la Agricultura, hasta la fecha registran un acumulado real de 17 814 hectáreas, lo que representa un 103 por ciento de cumplimiento, y se mantiene la presencia de viandas rústicas como el boniato, la yuca, la malanga y el plátano.
Sin embargo, aún existen territorios por debajo del ciento por ciento de los planes, como es el caso de Mantua, Minas de Matahambre y Guane.
Explicó Rodríguez Perugorría, que a pesar de las limitaciones se potencian recursos para las hortalizas de fin de año, especialmente el tomate, cultivo del cual se esperaba contar con unas 300 hectáreas, pero debido a las lluvias de septiembre se perdió una buena cantidad de semilleros.
“Hasta el momento, contamos con cerca de 200 hectáreas de tomate en una situación bastante buena, fundamentalmente en áreas del municipio de Sandino, y lo mismo sucede con el pimiento y el pepino”, dijo.
En el caso del arroz, especificó que presentan un atraso considerable. De las 9 000 hectáreas previstas en el año, 3 500 corresponden a la campaña de frío, y hoy cuentan con 159 plantadas de las 400 planificadas para el mes de noviembre.
Sobre ese renglón, el subdelegado refirió que la situación debe mejorar a partir de un proyecto de inversión extranjera con Vietnam.
“Comenzaron con un usufructo de unas 300 hectáreas de tierra que deben quedar plantadas antes del cierre del año. Ellos ponen la tecnología, la semilla, la mayor parte de los insumos, y Cuba pone la fuerza de trabajo”, apuntó.
Agregó que prevén llegar a las 1 000 hectáreas el año próximo y continuar creciendo hasta 5 000 en áreas compactas, lo cual garantizaría el arroz que necesita la provincia, pues los rendimientos estarían por las siete u ocho toneladas por hectárea.
“Es un resultado que debe lograrse en correspondencia con la tecnología que utilizan y con los insumos que se garantizan, además de la calidad de la semilla”, precisó.
Rodríguez Perugorría remarcó que es una campaña fuerte, que lleva también el peso de la tabacalera, pues una buena parte de los productores de la hoja siembran cultivos varios, sobre todo en áreas de las cooperativas.