Articular en una sola norma el establecimiento de derechos y obligaciones para la salvaguarda de los bienes, sitios, así como los recursos materiales e inmateriales de la nación se encuentra entre lo más relevante de la Ley 155, Ley General de Protección del Patrimonio Cultural y Natural aprobada en Cuba en mayo de 2022.
Sobre las generalidades y novedades de esta legislación recibieron un seminario de capacitación presidentes de Asambleas Municipales del Poder Popular, Intendentes, especialistas del Consejo Provincial de Patrimonio, directores de sistemas de Casas de Cultura y Museos de los 11 municipios de la provincia de Pinar del Río, para de esta forma poder crear las condiciones en los territorios para su implementación.
El encuentro desarrollado en la sede de gobierno, fue presidido por Eumelin González Sánchez, Gobernador del territorio y conducido por Nilson Acosta Reyes, Vicepresidente del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, para quien este documento resulta de gran importancia, pues otorga al acervo natural una identidad propia, reconoce responsabilidades institucionales y refuerza el sistema de gobierno a nivel municipal.
» No sólo se adecua a la nueva Constitución aprobada en 2019, sino también tiene en cuenta una serie de definiciones que en el ámbito internacional se manejan sobre el patrimonio cultural y que necesariamente teníamos que llevarlo al marco jurídico para facilitar los procesos y la actualización de la terminología vinculada al tema», dijo.
«Se incluyen en el documento el establecimiento de contravenciones cuando se actúa no debidamente en relación a la protección de lo patrimonial, pero yo creo que el paso más importante y decisivo es que establece el patrimonio cultural de los municipios, es decir, la ley da facultades a los órganos locales, para declarar cuál es el patrimonio cultural de ese territorio y las acciones que deben realizarse para garantizar su conservación en el tiempo».
Acosta Reyes destacó además que la nueva legislación «hace mucho hincapié en los procesos educativos y eso nace con la comunidad, con la escuela, de que se pueda trasmitir a las nuevas generaciones la importancia que tiene el patrimonio cultural, ya no sólo como un elemento que los identifica sino como un ente que puede contribuir al desarrollo local y al mejoramiento de las poblaciones».
Recalca el directivo que la Ley 155 ofrece una mirada integradora a la hora de hablar de patrimonio, que es natural y también cultural.
Para Doris Castillo Garriga, responsable del departamento técnico de museos y museología del Centro Provincial de Patrimonio en Pinar del Río el gran acierto de esta nueva ley es que «aglutina todas las normas jurídicas que habían sobre el patrimonio y estaban un poco dispersas, y un poco los territorios se perdían a la hora de implementar o hacer cumplir todo lo que tenía que ver con la protección del mismo.
«Además está incorporando por primera vez todo lo que tiene que ver con la cultura popular tradicional de los pueblos y que es el municipio el encargado y el principal gestor de la protección del patrimonio que declaren o no en estos lugares», añadió.
Castillo Garriga considera muy necesarias estas capacitaciones teniendo en cuenta » que somos una provincia que cuenta con un Patrimonio de la Humanidad «Viñales», que es muy rica en el Patrimonio Inmaterial con respecto a la producción de la Guayabita del Pinar, del Tambor Yuca, la cultura tabacalera, identitaria de toda esta región de la Vueltabajo, también la minería, que tenemos un Monumento Nacional Minas de Matahambre amenazado y que es del patrimonio industrial de los pocos en el país y Latinoamérica dónde un pueblo creció alrededor de la mina. Entonces es muy importante que tanto intendentes, presidentes de Asambleas, directivos de la cultura y los museos sepan gestionar y proteger este patrimonio».