Todos hemos pasado por momentos de alta tensión que nos generan estrés: un sentimiento de tensión física o emocional. Puede provenir de cualquier situación o pensamiento que nos provoque frustración, ira o nerviosismo. Cuando es constante, el estrés se considera como una enfermedad que afecta a nuestro cuerpo y salud de manera perjudicial. Por esto, resulta muy importante que conozcamos sus consecuencias, síntomas y señales, para poder combatirlo y contar con un buen estado de salud.
¿Cómo afecta el estrés al cuerpo?
Pese a que casi todos podemos reconocer cuando padecemos los efectos del estrés en el cuerpo, no sabemos a ciencia cierta el porqué se generan estos síntomas y qué es lo que sucede dentro de nosotros cuando estamos estresados. En pocas palabras, al estar expuestos ante una situación amenazante, nuestro cerebro se pone en estado de alarma y ordena a nuestro cuerpo a liberar hormonas. Esta respuesta ocasiona un desequilibrio interno que, si se mantiene, puede afectar y traer consecuencias permanentes. Incluso, ha rondado el mito de que se puede morir por estrés; y aunque el estrés no mata por sí mismo, sus efectos sobre el cuerpo sí empeoran nuestra calidad de vida. Es decir, las enfermedades a causa del estrés sí pueden ocasionar la muerte si no son tratadas con tiempo.
1.¿Qué sucede dentro de nuestro cuerpo por el estrés?
Al recibir un estímulo estresante o amenazante (ya sea real o potencial), nuestro cerebro procesa esta información de manera distinta para poder combatir aquella situación. Entonces, esta información se dirige a la amígdala, que es la parte del cerebro que regula nuestras emociones y la encargada de las tomas de decisiones. Al llegar a esta región cerebral, se activa el hipotálamo, el cual es el principal responsable del control y la producción de hormonas.
Después, el hipotálamo comienza a generar una hormona mejor conocida como corticotropina, la cual desencadena junto a la adrenalina (que es liberada por nuestro sistema nervioso) la producción de la hormona del estrés o cortisol. La hormona del estrés junto a la adrenalina y otros componentes químicos acceden al torrente sanguíneo y es cuando comienzan a dispersarse. A consecuencia de esto, se comienza a elevar el azúcar en la sangre, a la vez que la adrenalina provoca un aumento del oxígeno que circula en los músculos del cuerpo.
Este proceso es natural, por lo que no hay que preocuparse en cómo el estrés afecta al cuerpo, hasta cierto punto. La situación es muy diferente cuando se presenta de manera constante o periódica; en este caso ya se llama estrés crónico y aquí es cuando es considerado como una enfermedad que puede traernos grandes consecuencias a nuestra salud, tanto física como mental.
Un claro ejemplo de estrés crónico es el síndrome de Burnout, que se da específicamente en el área laboral, también se conoce como el síndrome del trabajador quemado. Las constantes presiones laborales ocasionan un trastorno emocional que se refleja en un estado mental persistente de cansancio, insatisfacción y malestar. Si no es tratado a tiempo, este síndrome al igual que cualquier caso de estrés crónico, puede traer consecuencias a perpetuidad.
2. Efectos del estrés en el cuerpo
Después de que se da aquel proceso en nuestro interior, comienza a revelarse la forma en que el estrés afecta al cuerpo. Al estar constantemente expuestos a un estímulo estresante, nuestro cuerpo se mantendrá en estado de alerta, a pesar de que no exista ningún peligro, por lo que nuestro cuerpo seguirá produciendo hormonas y seguirá en desequilibrio. A largo plazo, las consecuencias del estrés en el cuerpo pueden reflejarse como otras afecciones médicas. Entre ellas podemos destacar la siguientes que suelen ser las más comunes entre las personas que sufren de estrés crónico.
Hipertensión arterial
En esta enfermedad la presión que hay en nuestras arterias cuando late nuestro corazón excede los parámetros normales. Esto puede llevar a deficiencias renales, problemas cardiacos, accidentes cerebrovasculares y problemas en los ojos.
Diabetes
En esta enfermedad el cuerpo no puede regular los niveles de azúcar en la sangre. Al ser un problema crónico, esta puede dañar ojos, riñones, nervios, piel, corazón y vasos sanguíneos. También puede ocasionar la amputación de los miembros inferiores.
Obesidad
En esta enfermedad se tiene un exceso de grasa corporal. Al estar estresados solemos comer demasiado por la ansiedad provocada. Esto puede causar otros problemas como enfermedades coronarias, problemas respiratorios, cáncer (de endometrio, de mama y de colon), degeneración de los huesos y el cartílago, altos niveles de colesterol e infertilidad.
Depresión
En esta enfermedad existen un trastorno del estado anímico en el cual los sentimientos de tristeza, ira o frustración interfieren con la vida diaria. A su vez, nos sentimos fatigados, desconcentrados y con cambios graves en nuestro apetito.
Acné
En esta enfermedad la piel se ve afectada por la aparición de diferentes granos o barros. Puede provocar quistes, cicatrices y costras, al igual que infecciones cutáneas, dolores, molestias y piquiña.
Como ves, nuestro cuerpo es un sistema que trabaja en conjunto, por lo que el estrés afecta al cuerpo de diferentes maneras que se relacionan con otras enfermedades que pueden afectar nuestro funcionamiento y diario vivir. Queda más que claro que esta enfermedad no puede pasarse por alto y es necesario tenerla bajo control.
3. Efectos positivos del estrés
Después de haber leído sobre cómo afecta el estrés a nuestro cuerpo de forma negativa, parece muy extraño pensar que también existen algunos aspectos positivos. Algunos expertos aseguran que el estrés, siempre y cuando sea manejado con moderación, puede resultar positivo para nuestra salud. Incluso, debemos pensar que el estrés es una respuesta adaptativa, por lo que también se hace necesario en nuestra vida, pues nos permite responder ante ciertas amenazas, peligros y retos.
Como te lo mencionamos, durante una situación de estrés nuestro cerebro se pone en estado de alerta, lo que nos ayuda a estimularlo y así hallar soluciones más rápidas y certeras ante aquella situación. Igualmente, se ha detectado que en situaciones estresantes es más fácil retener la información. De hecho, un estudio descubrió que, dentro de un grupo de hombres jóvenes, la memoria mejoraba después de haber sido sometidos a situaciones estresantes. Otros de los efectos positivos son el de desarrollar la creatividad, así como también la capacidad de ser más responsables ante determinadas tareas.
Lo importante es reconocer los síntomas del estrés y aprender a drenarlo. Sin duda alguna, todos estamos sometidos a situaciones que nos generan preocupación por lo que lograr controlar nuestros pensamientos y emociones es la clave para que el estrés no se apodere de nuestra vida.
4. Señales de estrés en el cuerpo
Ya hemos cubierto la forma en cómo el estrés afecta al cuerpo, por lo que ahora revisemos cuáles son sus síntomas y señales, que pueden presentarse tanto de forma física como emocional. De hecho, cada uno de los síntomas físicos se refleja como una consecuencia emocional y viceversa. Por este motivo, debemos estar atentos a cualquier síntoma para combatir el estrés a tiempo.
En cuanto a las señales físicas del estrés en el cuerpo tenemos: diarrea o estreñimiento, baja concentración y mala memoria, dolores de cabeza (y en general) frecuentes, diferentes problemas y cambios en el deseo sexual, cuello y mandíbula rígida, dolores estomacales, pérdida o aumento de peso, tensión o dolor de músculos y del pecho y problemas para conciliar el sueño o insomnio.
Ahora, en cuanto a las señales emocionales del estrés en el cuerpo tenemos: constante sensación de fatiga o cansancio, falta de energía y concentración, uso de alcohol o drogas como relajantes, sensación de desanimo, tristeza o ansiedad, fácil irritabilidad o enojo, inquietud y sentirse abrumado.
Por otra parte, el estrés es una de las mayores causas de por qué tenemos antojos de comida, estos obedecen tanto a una señal física como una emocional; por lo que si te encuentras con grandes ganas de consumir comida basura, crocante o picante es una señal de que algo en tu cuerpo no está del todo correcto a causa del estrés. Ten muy presente que estos mismos síntomas afectan al cuerpo al igual que el mismo estrés, por lo que no puedes descartarlos sino buscarles una solución a largo plazo. Por esto mismos, no dejes de leer el siguiente apartado para conocer algunas forma de tratar y disminuir las consecuencia del estrés en el cuerpo.
5. Cómo prevenir las consecuencias del estrés
El estrés puede ser ocasionado por distintos factores. Existen diferentes remedios y soluciones tanto para el estrés como para los efectos y consecuencias que este produce en nuestros cuerpos. Recuerda que si sufres constantemente de estrés, esto afecta al cuerpo de igual manera, por lo que es recomendable que consultes con un médico profesional.
Ahora bien, veamos algunas formas en las que puedes combatir los efectos del estrés en el cuerpo por ti mismo. En primer lugar puedes hacer actividad física constantemente, realizar prácticas de relajación, tales como la respiración profunda, la meditación, el yoga, el taichi o los masajes. También procura pasar parte de tu tiempo libre con amigos o familia y también es muy importante que reserves tiempo para algún hobby o pasatiempo que sea de tu agrado. Este tipo de actividades harán que tu cuerpo se relaje y libere endorfinas, haciendo que el desequilibrio hormonal por estrés se regule y tu cuerpo no se vea afectado.
Tomado de: https://supercurioso.com/como-afecta-el-estres-al-cuerpo/