Encontré esta opción en un libro de recetas y pensé que podría ser de gran ayuda. Se trata de una forma sencilla para que el ají cachucha dure más y no se te echen a perder.
La receta es bien sencilla: lava los ajíes, quítale las semillas, ponlos a secar al sol y cuando ya estén secos (se sabe porque se ponen crujientes) los mueles y haces el polvo. También se pueden batir.
Esta es otra forma de conservar los ajíes y les adelanto que queda muy rico: corta el ají y sácale las semillas, hiérvelos y pásalos por la batidora, luego lo cuelas y lo punes al fogón nuevamente para que espese. Cuando ya esté lo vacías en un recipiente y le agregas un poquito de aceite.