Yomara Román García no puede disimular la alegría de ver su vivienda reconstruida, luego de que el pasado 27 de septiembre los vientos del huracán Ian la destruyeran, en la comunidad rural El Sitio, una de las que en Pinar del Río sufrió los estragos del evento hidrometeorológico.
De los 62 derrumbes totales registrados allí, 56 casas de tipología IV —zapata, paredes de madera y cubierta de zinc— ya fueron concluidas y entregadas hoy a Román García y otros habitantes, en saludo al cumpleaños 97 de Fidel Castro; una obra fruto del esfuerzo de trabajadores de empresas del sistema de la agricultura, a cargo de la construcción.
Mi casa estaba en malas condiciones antes del ciclón y gracias a la Empresa de Semillas y a trabajadores santiagueros ahora es nueva; pero también me dieron las camas y tanques para almacenar agua, explicó la lugareña.
El Sitio quedó devastado y hace casi un año aquí no se descansa para poder recuperarnos de las afectaciones, apuntó Mayra Casanueva Rodríguez, delegada de la circunscripción enclavada a unos 15 kilómetros de la ciudad capital.
Solo cuatro de las 136 viviendas existentes no sufrieron algún daño; mientras ya tienen solucionado, además, la mayoría de los perjucios totales y parciales de cubiertas, que ascendieron a 70.
Casanueva Rodríguez constituye una de las damnificadas, pues perdió todo el techo de su casa; mas asegura que se establecieron prioridades en la comunidad, teniendo en cuenta los casos vulnerables y madres con tres hijos menores.
La población no se ha quedado de brazos cruzados en el proceso de recuperación —insistió—, incluso creamos brigadas y han sido unos constructores más.
Yamilé Ramos Cordero, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y primera secretaria de la organización política en la provincia, convocó a los pobladores a un mayor aprovechamiento de sus tierras —la principal riqueza de ese lugar—, el mejor tributo a Fidel y a los hermanos Saíz, estos últimos asesinados el 13 de agosto de 1957 por esbirros de la dictadura de Fulgencio Batista.
Ydael Pérez Brito, ministro de la Agricultura, remarcó la necesidad de recuperar las comunidades agropecuarias, forestales y tabacaleras, no solo tras el paso de un huracán sino para mejorar las condiciones de vida de sus habitantes y poder aumentar la producción de alimentos.
Esto es parte fundamental de la Ley de Soberanía Alimentaria; estamos en el campo y en el campo hay que vivir bien, detalló.