La aplicación de la tercera dosis del candidato vacunal anti COVID-19 Abdala concluyó hoy en la región suroriental de Cuba, luego de iniciada la fase III de ensayo clínico el 22 de marzo pasado.
Según Francisco Hernández, jefe de Estudio Clínico, la etapa culminó con una adherencia al protocolo superior al 97 por ciento, cifra que refleja la permanencia de la mayoría de los 48 mil 290 voluntarios de los municipios Bayamo, Santiago de Cuba y Guantánamo incluidos en la investigación.
El experto confirmó a la ACN el adecuado perfil de seguridad del CIGB-66, estimado en las fases I-II, porque solo se registraron eventos adversos leves como cefalea, dolor y eritema en la zona de la inyección, muchos de ellos sin necesidad de medicación.
Sobre la eficacia del producto informó que el lunes -3 de mayo- comenzará la evaluación de esa variable, la principal en este período de la investigación, a partir del seguimiento a todos los sujetos, con la finalidad de detectar a quienes resulten positivos sintomáticos a la infección por virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad.
Para Naidelis Galbán, última voluntaria en recibir la dosis del inmunógeno, la vacuna Abdala deviene una de las maneras para proteger a su hijo y demás familiares y amigos del terrible padecimiento, por eso siempre acudió –en las fechas señaladas- al sitio clínico del hospital provincial Saturnino Lora, de esta urbe.
La joven resaltó este logro de la ciencia cubana, en especial de los hombres y mujeres del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), entidad promotora de la formulación farmacéutica, y agradeció a todos los profesionales que la atendieron por el trato y la confianza transmitida desde el primer día.
Satisfecha por su aporte a un proceso sin precedente para la medicina nacional, Galbán afirmó que Cuba podrá contar con ella para este y otros empeños similares.
El 7 de diciembre de 2020, el candidato vacunal CIGB-66 inició el camino para demostrar su seguridad, inmunogenicidad y eficacia frente al SARS-CoV-2, mediante un esquema corto de inmunización 0-14-28 días, casi medio año después finaliza la vacunación asociada a la fase III del ensayo y hoy se afianza como una de las esperanzas de los caribeños para frenar la amenaza que significa la pandemia de COVID-19.