En una Copa África de Naciones como pocas se han visto, Costa de Marfil se ha coronado reina del continente africano. El combinado marfileño completa una gesta milagrosa tras superar una infinidad de obstáculos inimaginables contra una Nigeria que se quedó a las puertas de la gloria (2-1).
La disputa por la gloria africana arrancó con una intensidad asfixiante que ha sido la tónica dominante del torneo continental. Costa de Marfil, anfitriona de la competición, tomó la responsabilidad de tomar su versión más ofensiva en la cita final contra una Nigeria que aprovechaba las eléctricas transiciones ofensivas para crear peligro a ‘Los Elefantes’
Fue una guerra sin cuartel. Costa de Marfil acumuló las mejores ocasiones de la primera mitad, aunque sin inquietar a unas ‘Águilas’ que esperaban su oportunidad con paciencia. Tuvieron su recompensa minutos antes del descanso, cuando William Troost-Ekong aprovechó un rechace tras un saque de esquina para rematar con una potencia bestial al fondo de la red que enmudeció Abiyán (1-0).
‘Los Elefantes’ no se rindieron, como tampoco lo han hecho desde el arranque de un torneo donde han superado obstáculos inimaginables hasta llegar a la gran final. Estuvieron cerca del empate antes del descanso, aunque las múltiples atajadas de Nwabili afianzaron la ventaja de Nigeria en la primera mitad.
El descanso espoleó definitivamente a una Costa de Marfil que se aupó con su gente para buscar la gloria africana. Un córner botado por Simon Adingra cuando se cumplía una hora de encuentro acabó siendo rematado por un imperial cabezazo de Franck Kessié que igualó el marcador (1-1). El ‘presidente’ desató la locura de un Abiyán entregado con sus jugadores que llevó a su equipo en ‘volandas’.
El equipo se dejó llevar por el empuje de su gente para enjaular a una Nigeria acorralada en la segunda mitad. Apenas diez minutos antes del final del tiempo reglamentario, Simon Adingra hizo diabluras en banda para mandar un centro preciso que Sebastien Haller punteó al fondo de la red (2-1). El tanto dejó sin tiempo reacción a unas ‘Águilas’ que intentaron apurar sus opciones hasta el final, aunque la gloria africana estaba destinada para sus rivales.