El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha asegurado que la creación de una vacuna contra la COVID-19 no significará el fin de la pandemia “por sí sola”, según lo declaró durante una rueda de prensa este viernes.
“Una vacuna será una herramienta vital y esperamos tenerla lo antes posible”, explicó Adhanom Ghebreyesus. “Pero no hay garantía de que la consigamos, e incluso si tenemos una vacuna no acabará con la pandemia por sí sola”, añadió.
El jefe de la OMS indicó que, a pesar de que a lo largo de los últimos ocho meses el organismo ha aprendido mucho sobre la nueva enfermedad —que ya ha dejado unas 780.000 muertes y más de 22 millones de infectados en todo el mundo—, todavía sabe “relativamente poco” sobre los efectos a largo plazo que esta pueda tener.
El progreso no significa victoria
Ghebreyesus ha manifestado que varios países están experimentando nuevos brotes después de un largo período con poca o ninguna transmisión, subrayando que esto debe servir de “advertencia” para aquellas naciones en las que hay una tendencia a la baja en cuanto al número de casos.
“El progreso no significa victoria”, aseveró, detallando que “la mayoría de las personas sigue siendo susceptible a este virus”. Por ello, ha instado a todos los países a controlar el virus utilizando las herramientas de las que disponemos en la actualidad para mantener a la gente a salvo.
Asimismo, ha indicado que, si bien las cuarentenas permitieron a muchas naciones suprimir la transmisión y aliviar la presión sobre sus respectivos sistemas de salud, no son una solución a largo plazo para ningún país, haciendo hincapié de que “la pandemia es un recordatorio de que la salud y la economía son inseparables”.
Oportunidad única
En este sentido, el director del organismo ha afirmado que la OMS se compromete a trabajar con todos los países para pasar a una nueva etapa de apertura de sus economías, sociedades, escuelas y empresas de forma segura, si bien ha admitido que “no volveremos, no podemos, volver a cómo eran las cosas [antes]”.
“A lo largo de la historia los brotes y las pandemias han cambiado las economías y las sociedades. Ésta no será diferente”, dijo el director general de la OMS, agregando que la COVID-19 ha dado un nuevo impulso a la necesidad de acelerar los esfuerzos para responder al cambio climático. “La pandemia nos ha permitido vislumbrar nuestro mundo como podría ser: cielos y ríos más limpios”, explicó.
El alto funcionario cree que “las dificultades son siempre una oportunidad para aprender, crecer y cambiar”, destacando que la crisis sanitaria actual es una “oportunidad única en un siglo de dar forma al mundo que heredarán nuestros hijos: el mundo que queremos”.
(Con información de medios y agencias)