Lograr la soberanía alimentaria que se pide por las máximas autoridades del país, es aún una batalla por ganar en numerosos terrenos y espacios de nuestra provincia, y mucho más al interior de cada municipio. Para ello se deben dejar atrás las mentes obsoletas, y se debe comenzar a aplicar criterios y alternativas que en escenarios convencionales ni siquiera se pensarían.
El contar y explotar los recursos endógenos de los que dispone cada vega, finca o polo productivo, solo tendrá como futuro próximo el de más producciones, más rendimientos y un colectivo contento y orgulloso.
Tener una vez los alimentos propios para un pleno desarrollo, con el que además se le pueda servir a la comunidad, es una meta que debería ser conquistada lo antes posible y sin miramientos.
El camino no siempre será fácil, estará lleno de obstáculos, será pedregoso y habrá quienes pongan más excusas que empeño. Sin embargo, es aquí donde la voluntad y el actuar colectivo deben crecerse.
Tal es el caso de la empresa genética porcina El Tigre, ubicada en el municipio de Consolación del Sur. Allí, sus directivos y trabajadores se esmeran por cada día superar barreras y hacer suyo plenamente el concepto de autoabastecimiento sostenible.
En días recientes, a este colectivo se le entregó, gracias a los resultados alcanzados en materia de autoconsumo y sobrecumplimiento de su objeto social, la distinción Por el sendero de la victoria, lauro que otorga el secretariado nacional de la CTC, a propuesta del Sindicato de Trabajadores Agropecuarios, Forestales y Tabacaleros.
Guerrillero fue tras la pista de las labores y metas que los hicieron merecedores de esta condición.
EL PROCESO Y SUS RESULTADOS
El llamado a ser más productivos caló hondo en este colectivo, pues desde hace algún tiempo, trabajadores y directivos vienen dando pasos en la transformación de los escenarios circundantes.
Así, con grandes metas en mente, “El Tigre” desmontó poco más de 43 hectáreas de tierra infestadas de marabú para ponerlas a producir, con la intención de alcanzar el deseado autoconsumo en un primer momento.
De acuerdo con su directora, Madelyn Romero Bravo, de forma inicial, una vez preparadas las tierras para la siembra, la unidad se inclinó por las viandas y hortalizas, a las que poco después se les fueron sumando otros cultivos, la acuicultura, la crianza de ganado menor y la tenencia de aves de corral.
Además, aseguró que uno de los puntos fuertes de esa Empresa es la siembra y cultivo del arroz.
“Utilizamos cada espacio posible para este grano. Cada pedazo de tierra que exista, si tiene las condiciones o podemos acondicionarlo para ello, lo sembramos. Con esta mentalidad, el pasado año obtuvimos poco más de 35 cordeles. En cambio, este año nos propusimos superar esa meta y ya vamos por más de 50”, añadió.
Por otra parte, la puesta en marcha de varios módulos pecuarios como son los casos del ganado menor y mayor, ha sido exponencial en cuanto a experiencia acumulada y cantidad de animales en el campo.
Los trabajadores se muestran orgullosos de lo conseguido en este aspecto, y tienen un gran optimismo en que, con buenas prácticas y atenciones, la masa crezca mucho más.
“En esto ya damos pasos seguros. Creo que vamos por buen camino, pues ya estamos pensando en ir más allá con esos animales, queremos incursionar directo en la comunidad.
“Esto no hace que se dejen de la mano lo relativo al cultivo de las hortalizas, viandas y demás vegetales, ya que para nosotros son tan o más importantes que el ganado. Y hemos venido ganando espacio con la siembra de frutales”, acotó la directiva.
Tal es así, que ya están listas para cosechas más de 100 matas de frutabomba con pariciones de lujo, y otras 150 matas de guayaba que serán destinadas a las meriendas y almuerzos de la propia Empresa.
Aparejado a lo anterior, “El Tigre” continúa con la cría de aves de corral, una práctica que lleva a cabo desde hace varios años con gallinas y codornices, de las cuales obtiene una gran cantidad de huevos que satisfacen la demanda interna, y posibilitan la venta en ferias agropecuarias.
Todo lo anterior ha sido, en parte, gracias a la aplicación de conceptos como el de naturaleza viva y la biodiversidad sostenible, ya que se trabaja en gran medida con los recursos que están a la mano, en el campo, lo que la tierra ofrece.
“La producción de abonos orgánicos obtenidos de los desechos naturales y de nuestros animales en cría, es también uno de los renglones que más nos han ayudado a garantizar las siembras mencionadas. El resultado en las cosechas de estos cultivos al aplicar estas alternativas es increíble”.
Más que alternativas y metas a vencer, las prácticas empleadas por solo los seis trabajadores que en “El Tigre” laboran, ya son un modo y una filosofía de vida que, a la par de rendimientos, gratifica el alma.
“Nosotros fuimos acatando conceptos para que nuestro entorno fuera más productivo. Además, siempre tuvimos la intención de alcanzar un autoabastecimiento sano, que con el tiempo rindiera dividendos que pudiéramos ofrecer de igual manera a la comunidad.
“Tanto así, que todo el marabú que desmontamos se ha utilizado para hacer carbón vegetal de muy buena factura y demanda. A la fecha continuamos desmontando áreas y utilizando el marabú obtenido con iguales fines”.
Madelyn añadió que en próximos días planean comenzar con el acopio de leche de vaca, carne de bovinos y el propio carbón vegetal, para así lograr encadenamientos productivos con otras entidades del territorio.
“Hemos llegado a un punto en el que solo nos resta abrirnos por completo a la comunidad en la que estamos enclavados. Por el momento, hemos sido capaces de llegar a los pobladores gracias a las ferias agropecuarias, en las que hemos presentado más de 14 productos de alta demanda obtenidos aquí. Sin embargo, pronto haremos realidad esta idea”.
“El Tigre” es hoy una pequeña empresa que bien demuestra que, aun con solo unos pocos trabajadores, es posible lograr rendimientos máximos y acaparar conceptos solicitados por el país.
Demostrar que la soberanía alimentaria es una meta alcanzable, según el criterio de todo el colectivo, es solo cuestión de voluntad, trabajo diario y constancia en cada actividad a desarrollar.
