El doctor José Raúl de Armas Fernández, jefe del departamento de Enfermedades Transmisibles del Ministerio de Salud Pública (Minsap) transmitió al pueblo un mensaje de alerta pero de tranquilidad, ante la epidemia del nuevo coronavirus COVID-19, que ya se ha extendido a más de 170 naciones, incluida Cuba.
Ante periodistas nacionales y extranjeros, el funcionario del Minsap reiteró este domingo la importancia de cumplir las medidas que se vienen dictando por el sector de la salud y otros organismos de la Administración Central del Estado implicados en este enfrentamiento, entre ellas –dijo-las de distanciamiento social en este momento son primordiales.
“Si logramos disminuir el flujo de personas a lo mínimo indispensable, si los pobladores solamente salen de sus casas a las labores esenciales, si no acuden a lugares públicos, si tratan de distanciarse lo más posible del resto, estaremos en condiciones de enfrentar esta pandemia de mejor manera”, enfatizó el doctor de Armas Fernández.
Igualmente el especialista insistió en la cooperación de los jóvenes, pues ellos son muy activos, participan en actividades colectivas como las fiestas, por lo cual llamó a reforzar las medidas de distanciamiento social en este grupo etario.
Advirtió que ante el más mínimo síntoma respiratorio es importante acudir al médico, porque en sus inicios esta enfermedad no presenta cuadros graves, sino comienza con síntomas casi imperceptibles, una tos que no llama la atención, malestar y fiebre que no alarma.
En declaraciones a la Agencia Cubana de Noticias el experto aclaró que también la COVID-19 puede ocasionar síntomas gastrointestinales como diarreas, vómitos y nauseas.
Alertó el galeno que ante cualquier manifestación se debe acudir a los servicios de salud inmediatamente para ser atendido, porque puede derivar en cuadros graves, y para evitar la diseminación de la referida dolencia en su familia y en la comunidad.
Señaló que en Cuba la progresión de los casos no se comporta de forma exponencial, ha tenido un aumento que corresponde al incremento y efectividad de la vigilancia de los casos que acuden a las áreas de riesgo, además porque se estudian a todas esas personas.
Precisó que actualmente en los centros de aislamiento y atención creados para la vigilancia clínico- epidemiológica en el país se encuentran ingresados 954 pacientes, de ellos 255 extranjeros y 727 cubanos, y 489 se evalúan como sospechosos.
También otras 30 mil 773 personas son vigiladas en sus hogares, desde la atención primaria, y el sistema nacional de salud cuenta con todos los recursos técnicos y humanos para enfrentar esta epidemia que se ha extendido a 172 naciones con más de 11 mil fallecidos y una letalidad de 4.15%, significó el experto.