El Grupo Temporal de Trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus, encabezado por el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, aprobó este martes un nuevo Plan para el enfrentamiento a la COVID-19 en Cuba, teniendo en cuenta la compleja situación epidemiológica que vive la nación, caracterizada por elevados niveles de transmisión de la enfermedad.
Ante esa realidad, caracterizada por un comportamiento ascendente de los casos positivos que a diario se diagnostican y la circulación de varias cepas del virus altamente contagiosas, el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, informó la decisión de pasar a todas las provincias a la fase de transmisión comunitaria de la etapa epidémica.
Esta es una fase –dijo- que no habíamos declarado antes en el país y conlleva la aplicación de nuevas medidas, encaminadas a cortar la transmisión, avanzar en la intervención sanitaria y, sobre todo, a disminuir al máximo la movilidad de la personas.
Acorde con ese escenario, el miembro del Buró Político y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, puntualizó que el nuevo Plan está diseñado solo para esta situación particular.
Este Plan, valoró, tiene que convertirse en la guía necesaria en los territorios, por la experiencia que en él se recoge del trabajo realizado por científicos, expertos, las máximas autoridades de Salud y el Gobierno, durante todo este tiempo de enfrentamiento al nuevo coronavirus.
Y a su vez, lo que se aplique tiene que parecerse a las provincias, a los municipios, a las localidades, y que se corresponda con las características propias de cada lugar. “Esta batalla se gana en el municipio”, reflexionó.
De igual manera, el Primer Ministro dio a conocer la decisión de enviar comisiones temporales de trabajo a las provincias más complejas: Matanzas, Ciego de Ávila, Camagüey, Santiago de Cuba, Pinar del Río y Mayabeque. Un seguimiento similar se ha venido realizando desde hace algunos días en La Habana.
Dichos equipos, que estarán presididos por las máximas autoridades del Partido y el Gobierno, e integrados por representantes de varios ministerios y otras estructuras del país, no van a sustituir el trabajo de la dirección de la provincia, aseguró Marrero Cruz. “Tienen instrucciones claras para apoyar, conducir y orientar cuestiones principales en esos territorios.”
UN PLAN A LA MEDIDA
Al referirse a los elementos generales que distinguen el nuevo Plan, el Ministro de Salud Pública precisó que para su elaboración se tomaron en cuenta las mejores experiencias de los anteriores planes de enfrentamiento que se han implementado en el país y que es imprescindible reforzar para hacer frente a la actual situación epidemiológica.
Según dio a conocer, las medidas van encaminadas fundamentalmente a extremar el control sanitario en los puntos de entrada al territorio nacional, para lo cual resulta esencial garantizar el cumplimiento de los protocolos.
En lo referido al fortalecimiento de la vigilancia epidemiológica, destacó el papel que en estos momentos tienen la pesquisa activa, dado el crecimiento sostenido de los enfermos, y el control de foco oportuno que contribuya a limitar el incremento de la transmisión.
Asimismo, insistió en la importancia de garantizar el aseguramiento médico e higiénico-epidemiológico de la población afectada y el proceso de intervención sanitaria con los candidatos vacunales. Avanzar en el proceso de vacunación es clave no solo para contener la transmisión de la enfermedad, sino también para disminuir la cantidad de pacientes que lleguen a los estados de grave y crítico y evitar el incremento de personas fallecidas, comentó.