Sesenta y tres días después de confirmados los primeros casos positivos a la COVID-19 en la mayor de las Antillas, el comportamiento de la enfermedad en el país se mantiene dentro de los pronósticos más favorables, y el Gobierno cubano, lejos de confiarse, continúa la evaluación sistemática de cada una de las medidas que se han diseñado para enfrentar la epidemia en los más diversos escenarios.
Como habitualmente sucede en las jornadas vespertinas, este martes el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, encabezaron un nuevo encuentro con el grupo temporal de trabajo para la prevención y el control del nuevo coronavirus, donde el titular de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, destacó la tendencia positiva a la disminución de los casos activos en el país.
Según detalló Portal Miranda, de los mil 804 pacientes confirmados a la COVID-19, al cierre de este lunes se encontraban ingresadas 447 personas, lo cual representa un 25% del total. Asimismo, destacó que el 99,1% de ellos mantenía una evolución clínica favorable.
Al registrarse 48 nuevas altas en la última jornada –comentó el Ministro de Salud Pública-, se constatan en el país un total de mil 277 pacientes recuperados, cifra que representa el 70,7% del total de confirmados.
Como acciones imprescindibles también en esta etapa, insistió en el control de los focos abiertos en diferentes lugares del territorio nacional y la constante vigilancia epidemiológica que debe existir en los eventos de transmisión local que se mantienen abiertos en el país.
Respecto a este último asunto, recordó que en Cuba se han contabilizado 44 eventos de ese tipo, de los cuales permanecen activos 20, tras confirmarse en las últimas horas el cierre del ocurrido en el consejo popular José María Pérez, en el municipio de Camajuaní, en la provincia de Villa Clara, después de 28 días sin que allí se produjeran nuevos casos.
El titular de Salud Pública ratificó que este martes inició, en todas las provincias, la realización de pruebas moleculares de PCR en tiempo real en muestras representativas de la población cubana aparentemente sanas. En el estudio está previsto -aseguró- tomar las muestras en las viviendas de las personas que forman parte de dicha investigación.
De igual manera, refirió que mientras el Sistema de Salud Pública cubano continúa inmerso en el enfrentamiento al nuevo coronavirus en el territorio nacional, 25 brigadas médicas del contingente internacional Henry Reeve, integradas por más de dos mil colaboradores, contribuyen a salvar vidas en diferentes lugares del planeta.
Las 23 que ya se encuentran trabajando –dijo- han atendido ya a más de 13 mil 600 pacientes confirmados con la enfermedad, de los cuales han salvado la vida a 473, en tanto han fallecido 38.
Del total de estos colaboradores, 975 atienden casos de COVID-19, 779 laboran en la llamada zona roja, y 54 se encuentran en centros de aislamiento.
Durante la jornada de este martes, y a través de videoconferencia, rindieron cuenta las provincias de Villa Clara, donde permanecen ingresados 24 de los 211 pacientes confirmados con la COVID-19, y La Habana, que continúa siendo, con 868 casos positivos, el territorio de mayor cifra en Cuba.
Ante el complejo escenario que vive la capital cubana, el gobernador Reinaldo García Zapata actualizó a la dirección del país respecto a la situación epidemiológica que en ella se manifiesta y las diferentes medidas que se adoptan para propiciar el control de la enfermedad.
Recordó que de los 21 casos diagnosticados en la jornada del lunes, 19 pertenecen a la provincia, nueve de ellos en el municipio de Playa, donde se realizan acciones de control en una manzana en la que se originó un foco de transmisión que dio lugar a la confirmación de un total de 10 casos positivos.
En dicho lugar –enfatizó- se han implementado medidas de aislamiento social para evitar que surjan nuevos casos y quienes fueron identificados como contactos se encuentran ingresados en los correspondientes centros de aislamiento.
Con el propósito de minimizar la movilidad de la población y disminuir los riesgos de contagio, durante la reunión se aprobó extender las medidas de aislamiento social aplicadas en el municipio de Centro Habana, también al de La Habana Vieja, territorio altamente transitado y donde confluyen diferentes comercios.
Particularmente sobre La Habana, el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, consideró que lo importante es actuar rápido ante la más mínima situación. Asociado a ello, insistió en la pertinencia de continuar realizando las pesquisas con calidad y objetividad; al tiempo que se debe propiciar el aislamiento inmediato de todos los contactos siempre que se detecte un nuevo caso positivo en cualquier lugar y así evitar que las cifras comiencen a crecer otra vez.