Ricardo Cabrisas Ruiz, vice primer ministro de la República de Cuba, y Adao de Almeida, ministro de Estado de Angola, sostuvieron hoy, en esta capital, conversaciones oficiales con el propósito de fortalecer la cooperación económica entre ambas naciones.
Cabrisas Ruiz agradeció en nombre del gobierno cubano la visita del líder angoleño, la intervención de su presidente, João Lourenço, y el voto del país africano en la Asamblea General de las Naciones Unidas a favor de la resolución que exige el fin del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba.
Manifestó que los intercambios que sostendrán De Almeida y su comitiva con los organismos cubanos constituyen un escenario propicio para evaluar el desarrollo actual de las relaciones bilaterales en la esfera económico-comercial y científico-técnica.
El vice primer ministro explicó los múltiples retos que ha tenido la economía cubana en los últimos años debido al recrudecimiento, sin precedentes, del bloqueo estadounidense, las afectaciones como consecuencias de los efectos del cambio climático y el impacto de la pandemia provocada por la COVID-19.
En ese sentido, resaltó la producción de tres vacunas propias y dos candidatos vacunales, así como la labor de los científicos y el personal de la salud que supieron crecerse en la atención a la población, y cuyas experiencias están a disposición del mundo y principalmente de los países africanos.
Cabrisas Ruiz dijo que Cuba está inmersa en cumplir los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030, mientras que Angola trabaja con una estrategia hasta el 2025, por lo que insistió en que ambos países deben esforzarse por encontrar la forma de complementarse, teniendo en cuenta sus potencialidades.
Consideró necesario incrementar los intercambios entre los diversos actores económicos de las dos naciones, en especial las grandes empresas que constituyen el sostén de la economía.
Por su parte, Adao de Almeida afirmó que constituye un gran placer y un honor estar en La Habana, y discutir aspectos importantes de la relación bilateral.
Rememoró que durante la guerra de liberación de Angola, la nación antillana estuvo presente de alma y corazón, y entregó la vida de sus hijos, de ahí que ocupe un lugar especial para su pueblo.
Después de obtener la independencia teníamos muchos retos y desafíos en los que el apoyo de la Mayor de las Antillas se mantuvo principalmente en áreas como la educación y la salud, y actualmente cerca de mil 900 cubanos brindan servicios en Angola, acotó el también jefe de la Casa Civil de la Presidencia y copresidente de la Comisión Intergubernamental Cuba-Angola.
Señaló que el país aspira a diversificar su economía para que deje de ser dependiente de la exportación de petróleo y pueda aprovechar sus potencialidades internas.
Puntualizó que resulta necesario abrir una nueva página en la colaboración con la nación caribeña para que la inversión se haga sentir en cada parte.
Angola es una nación abierta a la inversión extranjera en aras de diversificar la economía y fomentar empleos que contribuyan a lograr la sociedad próspera a la que aspiramos.
De Almeida resaltó la importancia de reforzar los lazos de cooperación entre los pueblos, para nosotros la hermandad y solidaridad con Cuba es fundamental, porque creemos que nuestras relaciones tienen un pasado, un presente y un futuro, precisó.
El ministro de Estado de Angola desde este domingo se encuentra en La Habana, donde estará hasta el miércoles 2, y tiene previsto encuentros con funcionarios gubernamentales y visitas a lugares relacionados con los sectores de cooperación bilateral.
Como parte del programa, rindió tributo a los internacionalistas cubanos que participaron en las luchas independentistas de su país, homenajeó al primer presidente de Angola, Agostinho Neto, en el Parque de los Próceres Africanos en esta capital, y visitó la Zona Especial de Desarrollo Mariel.
Cuba y Angola mantienen vínculos en diversos sectores estratégicos, entre ellos, el farmacéutico y biotecnológico, y promueven acuerdos en materia de educación, agricultura y cultura.
