Las acciones de desestabilización contra entidades del Estado cubano repiten el guión de golpe blando diseñado por Estados Unidos, enfatiza hoy el diario Granma.
En un análisis de hechos acontecidos el miércoles pasado cuando un grupo de manifestantes se concentró frente al Ministerio de Cultura (Mincult) con el objetivo de generar un clima de violencia y caos, señala el periódico.
‘La misión a cumplir, trazada de antemano, era, mediante el desacato y las acciones provocativas, obligar –de alguna forma– a las autoridades a actuar; buscaban un «choque», que las tensiones se desbocaran y se perdiera el control’, refiere el texto.
El artículo explica que la intención era llamar la atención, usar a los medios de comunicación financiados por el exterior para generar matrices de opinión favorables y convocar a más actores mediante las redes sociales.
Según el manual del Center for Applied Nonviolent Action and Strategies, el denominado golpe blando busca ‘generar focos de desacato, violencia y caos’.
En este sentido, Granma asegura que asediar a las instituciones gubernamentales, sembrar la zozobra, la desconfianza y el miedo es parte del mismo guion.
De acuerdo con el diario, lo que ocurrió frente al Mincult forma parte de esa estrategia de guerra ‘no violenta’ contra Cuba, un intento más para generar el detonante necesario que la haga posible.
‘Como se ha denunciado en otras oportunidades, lo que buscan (Estados Unidos) es crear las condiciones para una intervención directa en Cuba, estilo 1898, presentándose como salvadores de un país en caos’.
El Mincult repudió recientemente el accionar de esos manifestantes, al tiempo que reiteró la voluntad de dialogar con los creadores honestos, así como su negativa a aceptar provocaciones o a conversar con quienes consideró mercenarios.
También el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, denunció las acciones promovidas contra entidades del Estado, en una actuación que apunta a provocaciones en un entorno donde el país se enfrenta a la política hostil del bloqueo.
‘Nuestros ministerios no son tarimas mediáticas. Allí se trabaja duro’, escribió el mandatario en Twitter. En noviembre del pasado año se registró un incidente similar, cuando un grupo se reunió frente a la sede del Ministerio de Cultura, algunos alentados por individuos y medios pagados por agencias estadounidenses, como evidenciaron más tarde diversos materiales periodísticos.