La Cumbre del Grupo de los 77 (G77) y China comenzará hoy, en esta capital, donde jefes de Estado y de Gobierno de más de un centenar de países analizarán los principales problemas y desafíos en las relaciones Sur-Sur, en defensa del multilateralismo, de la paz, la soberanía y la unidad.
En el Palacio de Convenciones de La Habana transcurrirá hasta mañana la importante cita, cuya apertura estará a cargo de Miguel Díaz-Canel, Presidente de la República, por ocupar Cuba la presidencia pro tempore de ese mecanismo negociador, y de Antonio Guterres, secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
El tema central del encuentro es Retos actuales del desarrollo: el papel de la ciencia, la tecnología y la innovación, y en tal sentido el propio Guterres comentó que son elementos para aumentar el bienestar de todos los Estados y no las desigualdades, en alusión a los complejos y adversos problemas que enfrenta la humanidad tras el impacto de la pandemia de la COVID-19.
Se espera durante estos dos días un debate de alto nivel, sustancial, con pronunciamientos contundentes sobre los temas políticos y económicos más apremiantes para las naciones en desarrollo, en medio de la crisis internacional sistémica, al decir del canciller cubano, Bruno Rodríguez.
De las 134 naciones miembros del G77 y China más de 90 se han inscrito en la lista de oradores de la cumbre, a la que asisten también representantes de organismos internacionales, una demostración del interés que despierta el evento y del nivel de convocatoria de Cuba, según opinan personalidades foráneas.
Minuto a minuto, a través de los medios de comunicación y las redes sociales, podrán seguirse tales intervenciones, muestra de la transparencia y democracia que a su vez caracterizarán este encuentro, cuyos asuntos están en sintonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por la ONU como parte de la Agenda 2030.
El Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba adelantó que la Declaración Final es leal a los propósitos y principios del G77 y China, atenta a las necesidades de los países en desarrollo y apegada firmemente al reclamo del derecho al desarrollo, en medio de un orden internacional cada vez más excluyente, inequitativo, injusto y expoliador.
La mayor de Las Antillas asumió la presidencia pro tempore de la agrupación en enero último, y en correspondencia con ello este año La Habana ha sido sede de importantes eventos, entre ellos, las reuniones de ministros de Educación, Cultura y Turismo de sus naciones miembros.
Surgido en junio de 1964, es el mecanismo de concertación a nivel internacional más amplio y diverso de la esfera multilateral.