En nombre del pueblo y gobierno cubanos, el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, acudió en la mañana de este sábado a la residencia del embajador de la República Islámica de Irán en La Habana para expresar condolencias por el fallecimiento del Presidente iraní, Dr. Ayatolá Sayed Ebrahim Raisi, y sus acompañantes en el accidente aéreo.
En un ambiente solemne, el mandatario escribió en el libro de condolencias un mensaje al pueblo y la dirección del país persa, en un momento que calificó de profunda tristeza. Frente a los retratos del homólogo Sayed Ebrahim Raisi y el canciller Hossein Amir Abdollahian, quienes murieron en el siniestro del pasado 19 de mayo, Díaz-Canel expresó el sentido pésame y la solidaridad a familiares y allegados.
El Jefe de Estado cubano dejó plasmado que siempre recordará la amistad sincera compartida con Raisi en fructíferos encuentros, en los cuales expresaron mutuamente, el interés común de avanzar en el desarrollo de ambas naciones y enfrentar la injusticia en el mundo.
El hermano pueblo iraní y su dirección pueden contar con el apoyo de Cuba, añadió. «Sabemos que encontrarán las fuerzas para defender los grandes sueños de paz y prosperidad nacional, regional e internacional, a los cuales dedicó su vida el presidente Raisi. Su legado y el sentido del sacrificio en el servicio a su pueblo, perdurarán por siempre», cerró el mensaje.
Tras la firma del libro, el embajador de la República Islámica de Irán en Cuba, Seyed Mohammad HadiSobbani, agradeció al Presidente Díaz-Canel el gesto de que las principales autoridades cubanas acudieran directamente a manifestar sus condolencias, además de decretar duelo nacional. Sobre estas muestras señaló que «la expresión de sus condolencias y de todo el pueblo cubano en este momento tan difícil le llena de alegría el corazón».
El diplomático recordó que las visitas del Presidente Raisi a la Isla caribeña en junio de 2023 y la del dignatario cubano a Teherán, en diciembre del mismo año, afianzó los nexos y creó una amistad más sólida entre ambas naciones. «A pesar de que hemos perdido a dos grandes personalidades, dos grandes amigos de Cuba que apoyaban la consolidación de las relaciones entre los dos países, sí puedo asegurarle que las políticas de nuestro país con respecto a Cuba son inamovibles, no van a cambiar».
Más adelante aseveró: «además de la voluntad de las autoridades de nuestro país, el mensaje principal de la Revolución Islámica de Irán es la lucha y el apoyo a los países que batallan contra la opresión».
Con profundo pesar en la voz el Jefe de Estado cubano expresó al embajador iraní en Cuba: «Hemos perdido a un gran amigo». Seguidamente en la conversación rememoró los intercambios que sostuvo con su homólogo iraní, y la visita al país del Golfo Pérsico donde pudo sentir el cariño del pueblo y el compromiso de las autoridades con la Revolución Cubana. «Nunca olvidaré -apuntó- el encuentro tan sincero y cálido con el líder supremo Gran Ayatolá Ali Khamenei, ni los encuentros de amistad y hermandad con el Presidente Raisi».
Somos dos naciones -agregó- que enfrentamos sanciones, bloqueos e injerencias en nuestros asuntos internos, por tanto compartimos la lucha contra el imperialismo.