A las novedades de la versión 23 del proyecto del Código de las Familias estuvo dedicada la conferencia dictada por el doctor en Ciencias Jurídicas Leonardo Pérez Gallardo en la Universidad de Pinar del Río Hermanos Saíz Montes de Oca.
El derecho de las familias que vienen fue el título elegido por el letrado para nombrar su ponencia, puesto que los jóvenes recibirán en mayor medida los beneficios de la ley y serán ellos los responsables de afianzarla en los años venideros.
El también profesor titular de Derecho Civil de la Universidad de La Habana justificó la decisión de hacer alusión al término “familias”, en plural, desde el propio título de la norma a fin de reconocer modelos familiares diferentes al clásico matrimonial y nuclear.
Pérez Gallardo mencionó modificaciones contempladas en el anteproyecto como la eliminación de la autorización excepcional del matrimonio para adolescentes entre 16 y 18 años, por lo pernicioso que resulta permitir dichas alianzas, las cuales traen aparejadas graves consecuencias en el desarrollo de los menores, especialmente de las niñas propensas a la dependencia económica, el embarazo precoz y la deserción escolar.
La multiparentalidad es un nuevo concepto abordado en el proyecto de ley, referente a que las niñas y niños pueden tener más de un padre y una madre, a partir de vínculos socioafectivos, permanentes, estables y demostrables.
Se autoriza judicialmente la gestación solidaria siempre que no tenga fines de lucro y se perfilan otras instituciones como la corresponsabilidad parental o responsabilidad parental mancomunada, que democratiza los derechos de madres y padres en relación con la guarda y educación de sus hijos.
El catedrático mencionó además el reconocimiento al importante papel en la transmisión intergeneracional de las tradiciones, valores y afectos de abuelas, abuelos, otros parientes y personas allegadas y aseveró que el código integra deberes y derechos que se establecen para estas relaciones, como el derecho de los abuelos a mantener comunicación con sus descendientes.
De igual forma se regula la protección a individuos vulnerables, víctimas de violencia de género y personas con discapacidad.
“No se puede interpretar el Derecho de las familias sin tomar en cuenta que en cada institución está subyacente la búsqueda de la felicidad. Se trata de una expresión concreta y puntual del libre desarrollo de la personalidad”, sostuvo el letrado y agregó:
“La búsqueda de la felicidad es la manera a través de la cual el Derecho busca un estadío idílico. Casi nunca se encuentra plenamente; pero las continuas luchas de las personas, siempre se orientan con esa brújula, lo que nos lleva a plantearnos, que con cada paso que demos para proteger los derechos de las familias, deberemos procurar que los seres humanos sean felices”.
Durante el encuentro le fue otorgado al prestigioso jurista, la categoría docente especial de Profesor Invitado de la Universidad de Pinar del Río.