Jesús Javier García Pulido es un joven pinareño que decidió dedicar su vida al magisterio, él optó por la carrera de profesor para la enseñanza Técnica Profesional, y actualmente cursa el primer año en el politécnico Pedro Téllez Valdés, ubicado en el kilómetro uno en la carretera a San Juan y Martínez.
Allí lo encontramos junto a sus profesores y a otra compañera de estudio, mientras nos explicaba de forma diáfana que los materiales y herramientas que estaban en exhibición eran necesarios para las especialidades de Albañilería y Carpintería.
“En mi carrera recibo asignaturas teóricas y mucha práctica, porque si vamos a enseñar tenemos que hacerlo también prácticamente.
“Con la teoría sola no se aprende a levantar una pared ni a hacer una silla”, así nos concluye a la vez que nos muestra y nombra herramientas como la cuchara, el cepillo, la llana, la mandarria…
A su lado, Yordanka García Cruz, una jovencita que también decidió ser profesora, nos confiesa estar enamorada de su carrera.
“En unos años voy a enseñarle a los futuros constructores de Pinar del Río. Esta especialidad que escogimos es muy bonita, pero también muy necesaria, porque no se concibe el desarrollo de un país sin las construcciones; qué nos haríamos sin escuelas, hospitales, centros turísticos y recreativos, viviendas…
“Me gusta dar clases, ese es un arte que no todos poseen, y me siento realizada al saber que voy a enseñar a los jóvenes”.
Sobre el claustro de profesores nos hizo confesiones. “Son muy buenos, dan unas clases muy bien preparadas y educativas, se expresan correctamente y se empeñan en enseñarnos todo lo necesario, tanto teórico como práctico, para que mañana podamos ser tan buenos como ellos”.
DONDE SE FORMA LA FUERZA LABORAL DE LA PROVINCIA
Rafael Méndez Carmona es el director del Pedro Téllez, un centro que cuenta con una matrícula de 576 alumnos, distribuidos en los niveles de obreros, técnicos medio, oficios industriales y la formación pedagógica para la Educación Técnico Profesional.
El director afirma que las diferentes especialidades tributan al desarrollo económico de la provincia, porque la función social del politécnico es la formación de la fuerza laboral calificada.
En el caso de los técnicos medio se especializan en Planificación Física, Hidráulica y Construcción Civil; y los obreros se gradúan en Albañilería, Mantenimiento General de la Construcción, Carpintería en blanco y encofrado y Artesanía Industrial.
Además, la escuela asumió como reto la formación de la futura fuerza que impartirá clases en los politécnicos de los diferentes municipios de Pinar del Río, en las especialidades de Economía, Servicio, Electricidad, Mecánica, Informática y Construcción civil.
“Los graduados imprimirán juventud a los claustros envejecidos de los diferentes politécnicos”, aseveró Méndez Carmona.
Señaló que en este momento los estudiantes del centro están insertados en las diferentes formas para desarrollar la práctica preprofesional, la laboral, la de obtención de la calificación obrera y la de oficio, gracias a los convenios con los organismos del municipio de Pinar del Río y a que cuentan con dos centros productivos certificados como unidad docente, además de 15 aulas anexas para el desarrollo de habilidades profesionales.
El centro tiene 141 trabajadores, de los cuales 100 son docentes y los demás de apoyo.
DE LOS PROFES Y ALGO MÁS
Lesvia Alfonso es la subdirectora de Formación Profesional del politécnico, quien nos explicó que existen en la escuela 13 especialidades, casi todas relacionadas con la rama de la construcción, porque son el centro insigne de la provincia en este sentido.
Para la formación profesional hay un claustro de 52 profesores, todos licenciados en Construcción, y de ellos cuatro que se formaron en la carrera de formación pedagógica para la ETP, y que hoy se superan en la Universidad de Pinar del Río.
Por lo importante de la formación práctica, nos dijo que cuentan con diferentes modalidades, por ejemplo las que realizan en el Polígono, igualmente tienen un bloque de talleres para la especialidad de Carpintería.
Actualmente algunos hacen las prácticas preprofesionales y se vinculan a diferentes entidades y empresas.
“Los organismos nos han dado una respuesta a la hora de ubicar a los estudiantes, ellos nos respaldan en este tema, pero se les hace difícil hacerlo con la parte de los recursos materiales, que son con los que más tenemos problemas, poseemos herramientas que nos han llegado por el proyecto Profet”.
“Considero que tal vez no a la altura de otros tiempos, pero logramos entregar a la sociedad y al sector empresarial técnicos preparados con lo que tenemos, no hay un alumno que no sepa poner ladrillos, repellar, poner una ventana y enfrentar los problemas que se les puedan presentar”, precisó la subdirectora.
EN EL POLÍGONO
En la parte de atrás de la escuela visitamos el Polígono, allí el profesor Jorge Liván Varela impartía la Unidad número cuatro en Albañilería, que trataba entre otras cosas, del revestimiento de muro. El politécnico Pedro Téllez tiene un trabajo consolidado por años, muchos son los técnicos y obreros calificados que pasaron por sus aulas y que hoy constituyen parte de la fuerza laboral de la provincia.