En ocasión del Día del Idioma, fueron anunciados en Pinar del Río los premios del XXXVI Concurso Hermanos Loynaz, certamen convocado por el centro cultural del mismo nombre y su sello editorial.
Más de 120 obras de autores cubanos participaron en esta edición; mientras, el jurado en cada uno de los géneros estuvo conformado por destacadas personalidades de las letras en la provincia y el país.
En el género narrativa, el premio lo obtuvo el vueltabajero Pedro Luis González Cruz por el texto Las manchas del sol, novela histórica que exhibe una cuidadosa reconstrucción de época ambientada hacia finales del siglo XIX en Pinar del Río.
De acuerdo con el acta del jurado, los rasgos que nos afirman y definen como pinareños están nítidamente retratados en el libro, que también constituye un alegato contra la desmemoria.
En tanto, “¿Qué fue de los muñequitos rusos?”, del autor guantanamero Wilfredo Robas mereció el premio de poesía, por lanzarse a lo más hondo de la existencia humana con un discurso desgarrado, con cierta carga de humor e ironía, reproche y duda.
En este aparte, el jurado otorgó menciones a los cuadernos Divergencias de una condena, de Rosabel Pi González (Camagüey) y De La Habana salen los aviones, de Maritza Ramos (Pinar del Río).
Finalmente, el premio Loynaz en el apartado infantil fue conquistado por el poemario Paseo en quitrín, del autor pinareño Benigno Horta. El rigor formal de la escritura así como la altísima cubanía presente en el texto argumentan la elección del jurado, que decidió además otorgar menciones a los títulos Malcriadamente feliz, de Ana Margarita Arada (Las Tunas) y Mágicos caprichos, de Jesús Zamora (Las Tunas).
Las obras premiadas serán publicadas por Ediciones Loynaz y presentadas en la venidera edición de la Feria Internacional del Libro de La Habana.
