«Para esta edición de 2023, el Prix de Lausanne tiene el increíble honor de recibir al bailarín cubano y director del Birmingham Royal Ballet Carlos Acosta», señala la página prixdelausanne . Ganador de una Medalla de Oro en el Prix de Lausanne en 1990, es un verdadero símbolo de éxito y de «misión cumplida» para nuestra competición. Entregarle el premio Lifetime Achievement Award de 2023 mientras celebramos nuestro 50.º aniversario realmente genera una emoción particular, señala la nota.
Carlos Acosta aprendió a bailar en Cuba, su país natal. Mientras estudiaba en la Escuela Nacional de Ballet de La Habana, participó en el Prix de Lausanne en 1990 donde fue galardonado con una Medalla de Oro. Aunque esta distinción ya no existe hoy, marcó para él y muchos otros un talento que fue juzgado “casi fuera de competencia” 1. Desde su consagración en Lausana, su carrera literalmente despegó, como artista internacional con el Royal Ballet pero también como artista invitado con prestigiosas compañías como el American Ballet Theatre, el Houston Ballet y el English National Ballet. Después de participar también como invitado en el Birmingham Royal Ballet, se convirtió en su director artístico desde 2020. Tuvimos la oportunidad de hacerle algunas preguntas antes de su llegada a Lausana…
¿Qué opinas de la evolución de la danza en los últimos 50 años?
Creo que los propios bailarines son los que más han evolucionado. El estándar ha aumentado dramáticamente, y lo que el cuerpo de un bailarín ahora es capaz de hacer es increíble. En el ballet clásico, los pasos pueden ser los mismos pero se ejecutan de manera diferente y existe un mayor deseo de que los bailarines de hoy se mantengan al día con un cierto estándar y tal vez incluso superen esas expectativas. Me encanta cómo la danza contemporánea también ha abarcado tantos estilos diferentes; las posibilidades son ilimitadas y emocionantes, y los bailarines siempre deben estar listos para aprender nuevas técnicas.
En tu opinión, ¿cuál es el lugar de un concurso como el Prix de Lausanne en el mundo de la danza actual?
_Siento que esta competencia realmente significó el comienzo de mi carrera como bailarín personalmente, y sé que otros bailarines jóvenes sentirán lo mismo. Es una oportunidad de ser visto por los directores y mostrar de lo que eres capaz en el mundo del ballet, y es simplemente una hermosa tradición.
¿Cuál crees que es el mensaje más valioso para dar a los jóvenes bailarines de hoy?
_Seguir siempre buscando las estrellas y ser disciplinado contigo mismo. Muchos jóvenes bailarines se pierden en el mundo de las redes sociales, que es solo una realidad distorsionada. Ser capaz de hacer fouettés interminables no te convierte en un artista, así que nunca dejes de mejorar y trabajar en tu arte.