El Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, destacó este jueves los logros que se han ido obteniendo desde la ciencia cubana durante estos complejos meses de enfrentamiento a la COVID-19 en el país.
De las incertidumbres, aseguró, hemos pasado a consolidar resultados que demuestran avances y que hemos transitado por un camino científico que se va fortaleciendo.
Tales reflexiones estuvieron motivadas por un nuevo intercambio del Jefe de Estado y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, con expertos y científicos que desde la mayor de las Antillas no han perdido ni un minuto en buscar maneras para contrarrestar los efectos de la epidemia.
Aquí todos están cooperando los unos con los otros, sin vanidades; se van complementando y apoyando, y al final, lo que obtenemos es un resultado único para el bien común, valoró.
Una amplia variedad de temas se incluyen cada semana en este tipo de encuentros, en los cuales se ratifica el papel esencial que han desempeñado nuestros hombres y mujeres de ciencia y que en esta jornada incluyó la exposición de los resultados preliminares de un estudio de los factores de riesgo genéticos asociados a la severidad clínica con que se ha manifestado o no la enfermedad en Cuba.
Al respecto, la doctora Beatriz Marcheco Teruel, directora del Centro de Genética Médica, explicó que la investigación nace de las evidencias que se han estado publicando durante este periodo, relacionadas con posibles factores inmuno-genéticos y que pueden estar vinculados con la gravedad clínica con que se produce la enfermedad en determinadas personas.
El proyecto pretende abordar factores clínico-epidemiológicos que incluyen variables sociales como la ocupación, el color de la piel, los grupos de edades, los hábitos tóxicos, el historial de enfermedades, los niveles de estrés, y otras variables clínicas de naturaleza inmunológica y genética, tanto del individuo como de quienes conviven con él y están emparentados.
La investigación, en la cual participan diversas instituciones cubanas, y que en estos momentos se encuentra en fase inicial de desarrollo, evaluará además elementos como las características socio-demográficas de los pacientes recuperados; las enfermedades crónicas no transmisibles que padecen; la distribución de acuerdo con su grupo sanguíneo; la presencia o no de anticuerpos contra antígenos vacunales y otros.
Resultados preliminares evidencian, por ejemplo, que desde el 11 de marzo hasta el 11 de junio, periodo en el que se enmarca la selección de los pacientes contenidos en la muestra, es superior de manera general la cantidad de personas de piel blanca que enfermaron, así como predominan pacientes con el grupo sanguíneo A.
Este estudio, consideró la especialista, tiene como punto de partida a la comunidad y demuestra la valía de identificar inmuno-epidemiológicamente a nuestra población. El proceder que hemos seguido nos permite –aseveró- desarrollar tratamientos personalizados que den respuestas a características genéticas individuales y así disponer de elementos para diseñar e implementar estrategias poblacionales de prevención.
Hacia dónde encaminar las acciones de rehabilitación de quienes se recuperan de la enfermedad, contribuye también el análisis anatomo-patológico que se realiza a pacientes que han fallecido a causa del nuevo coronavirus, cuyos principales resultados fueron expuestos durante la jornada por la doctora Teresita Montero González, de los Servicios Médicos del Hospital Militar Central “Doctor Luis Díaz Soto”.
Para el estudio se tienen en cuenta, entre otros elementos, la distribución por grupo etario y sexo; así como el comportamiento de las enfermedades crónicas y su incidencia en el fallecimiento de los pacientes.
Hasta el momento, explicó Montero González, ha sido posible demostrar que las comorbilidades son factores fundamentales en la evolución de la enfermedad y responsables de la muerte en varios pacientes.
De igual manera, detalló, la presencia viral que se ha encontrado en órganos que no manifiestan alteraciones relevantes sugiere estudios posteriores en pacientes confirmados para evaluar futuros daños; así como se ha podido comprobar que la respuesta inflamatoria sistémica es una complicación frecuente, por lo que modularla oportunamente favorece la evolución de los pacientes.
Durante la jornada vespertina también se conoció acerca del aislamiento del SARS-CoV-2 a partir de muestras de exudados nasofaríngeos y necropsias procedentes de pacientes cubanos que se realizó en los laboratorios del Centro de Investigaciones Científicas de la Defensa Civil y fue presentado por la doctora Mirelys Rodríguez Acosta.
Los beneficios son inestimables, consideró, pues entre otros elementos nos permite caracterizar las cepas circulantes del SARS-CoV-2 en Cuba; disponer de colecciones de cepas autóctonas del nuevo coronavirus; evaluar in vitro la acción antiviral de productos de cualquier naturaleza, incluyendo las vacunas; la posibilidad de realizar estudios de filogenia y evolutivos del genoma; y socializar los resultados en revistas científicas especializadas.
En el intercambio trascendió además, el trabajo que se realiza en el país con más de cuarenta candidatos vacunales, en el cual han unido esfuerzos diversas instituciones.
De las experiencias de otros países en los modelos de desarrollo de la enfermedad habló el doctor Pedro Más Bermejo, vicepresidente de la Sociedad Cubana de Higiene y Epidemiología, quien recordó que en Cuba, tras el pico que se manifestó a los 45 días de la detección de los primeros casos, comenzaron a descender las cifras de pacientes activos, pero en el día 89 volvieron a ascender a causa de los eventos relacionados con la tienda La Época, los Laboratorios AICA y el buque que arribó desde México a la provincia de Matanzas.
La manera en que se manejó esta situación –comentó- permitió demostrar que es posible contener la aparición de rebrotes, si actuamos de manera inmediata y adoptamos las medidas correspondientes ante cualquier suceso, teniendo en cuenta la experiencia que ya el país acumula.
Asociado a ello, el viceprimer ministro Roberto Morales Ojeda, subrayó la importancia de no descuidar ninguna de las acciones que se han implementado. La manera en que se ha comportado la enfermedad en otras naciones tras relajar las medidas, nos ratifica que “ahora es cuando más estrictos tenemos que ser con el cumplimiento de las medidas de cada una de las fases”.
Como sucede de forma inalterable en estas citas con la dirección del país, el doctor en ciencias Raúl Guinovart Díaz, decano de la Facultad de Matemática y Computación de la Universidad de La Habana, comentó sobre el comportamiento de los modelos de pronósticos de la enfermedad en Cuba.
Lo más novedoso durante la semana –puntualizó- es valorar cómo la capital cubana se ha ido acercando, por el comportamiento de sus indicadores, hacia un pronóstico más favorable de la curva de casos activos, lo cual demuestra que en breve pudiera estar en condiciones de transitar hacia la fase uno de la etapa de recuperación de la COVID-19.
Así lo confirmaban también las valoraciones realizadas horas después por el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, al actualizar sobre la situación epidemiológica que presenta La Habana en la reunión del grupo temporal de trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus, encabezado en la tarde del jueves, como ya es habitual, por el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel; el vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa; y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz.
Portal Miranda añadió además que durante los últimos 15 días la capital viene disminuyendo su tasa de incidencia por cada cien mil habitantes, que hoy se encuentra en 4,92. En tanto, con 59 pacientes confirmados a la enfermedad que se mantienen ingresados, de los 63 que tiene el país, este jueves la provincia muestra en un 4,6% el indicador sanitario de casos activos, inferior al 5% necesario para transitar a la fase uno de la etapa de recuperación.
A través de videoconferencia, justamente la vicegobernadora habanera volvió a rendir cuenta sobre el comportamiento de la epidemia en el territorio, mientras que los gobernadores de Guantánamo, Holguín y Matanzas, en plena etapa de recuperación, comentaron acerca de las acciones correspondientes a esta primera fase, en la que aseguraron se observa un tránsito gradual en la cotidianidad de los territorios hacia la nueva normalidad.
Cuba avanza en este nuevo contexto, donde la manera en que hemos logrado ir superando poco a poco esta crisis, constituye una muestra fehaciente también de cuánto significa en nuestro país la integración de esfuerzos y saberes desde todos los escenarios.