El Proyecto IRES, primero aprobado y financiado para Cuba por el Fondo Verde para el Clima, realizará desde hoy un taller sobre uso y manejo de prácticas agroecológicas, informó la representación de la FAO.
Considerado una capacitación en sistemas forestales, agrícolas y ganaderos, el evento se desarrollará en los módulos agroforestales que forman parte del proyecto Incremento de la resiliencia climática de los hogares y comunidades rurales, IRES, a través de la rehabilitación de paisajes productivos en localidades seleccionadas.
De acuerdo con la oficina de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Cuba se abordará, entre otros temas, los sistemas agroenergéticos para la producción de energía y alimentos en el contexto de una economía circular, y las medidas de adaptación al cambio climático en sistemas agropecuarios.
También tratará acerca de la situación del agua y las acciones necesarias para la conservación de los suelos en los municipios vinculados a esta iniciativa, considerados vulnerables a los efectos del clima.
Implementado por el Ministerio de Agricultura con asistencia técnica de FAO, IRES es la primera iniciativa financiada por el Fondo Verde para el Clima y trabaja actualmente en siete de los municipios cubanos: Los Arabos en la provincia de Matanzas; Santo Domingo, Quemado de Güines y Corralillo en Villa Clara y Jobabo, Amancio Rodríguez y Colombia en la provincia Las Tunas.
Este programa es el cuarto diseñado por la FAO en América Latina y el Caribe y busca aumentar la resilencia climática de hogares y comunidades rurales a través de la rehabilitación de paisajes productivos en localidades seleccionadas de la nación caribeña.
También pretende impulsar el desarrollo de sistemas alimentarios inclusivos, sostenibles y resilientes, potenciar la conservación de los recursos naturales, ayudar al sector agrícola a adaptarse al cambio climático y fortalecer los medios de vida locales para la gestión de riesgos.
Con ese objetivo trabajará durante siete años con 51 mil 713 agricultores familiares, en particular 23 mil 788 mujeres, quienes impulsarán la producción agrícola en aras de impulsar la seguridad alimentaria a través de servicios ecosistémicos mejorados en el país.