Con el objetivo de proporcionar a los estudiantes una experiencia de aprendizaje más dinámica, participativa y personalizada se desarrolló en la Dirección General de Educación en Pinar del Río el Festival sobre Objetos Virtuales del Aprendizaje (OVA).
En el evento se presentaron cerca de 10 propuestas, y se logró demostrar cómo se concretan los objetivos e indicadores del Proyecto Perfeccionamiento Continuo del Sistema General de Educación, relacionados con los tres pilares fundamentales: la ciencia e innovación, la comunicación social y la transformación digital.
Según se explicó, los OVA son recursos educativos interactivos que utilizan tecnología digital para facilitar el proceso de enseñanza y aprendizaje, y puede incluir elementos como videos, juegos, animaciones, cuestionarios, entre otros.
En este primer festival fueron protagonistas los integrantes del Grupo de Tecnología Educativa de la Dirección General de Educación, metodólogos, docentes y estudiantes de diferentes instituciones educativas.
En la inauguración, la máster Yadira Álvarez García, subdirectora de Educación en la provincia, se refirió a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) como vías para impulsar los métodos y medios didácticos, a la vez que favorecen el proceso de enseñanza-aprendizaje.
La funcionaria abundó sobre el cambio de rol del docente en un ambiente rico en las TIC, en el que el profesor deja de ser fuente de todo conocimiento y pasa a actuar como guía de los alumnos, facilitándoles el uso de los recursos y las herramientas que necesitan para explorar y elaborar nuevos conocimientos y destrezas.
Álvarez García concretó que una de las propuestas que se manejan y que se propone como una experiencia de conocimiento basada en la tecnología son los OVA, y que en el país se trabaja en ese sentido.
En el evento estuvieron como invitados la Unión de Informáticos de Cuba y pioneros ganadores del Foro de Ciencia y Técnica.
El primer lugar lo obtuvo Aracelys Cabrera Roque, con Jugando con Margarita y Lapicín; el segundo fue para Gladys Vento Medina y Ana Belén Cabrera Lóriga, con Los números racionales; y el tercero lo recibió el trabajo No tenemos un planeta B, de Nuria Cordero Castro y Ana Belén Cabrera Lóriga.