Gracias al encadenamiento productivo con nuevos actores económicos, la Empresa de Productos Lácteos y Confitería Raul Fornell, de Pinar del Río, garantiza el cumplimiento de su encargo social, así como la venta a unidades comerciales y gastronómicas.
Seguimos siendo una unidad estatal socialista y las alianzas nos benefician señaló Emilia Aguirre López, directora del área de regulación y control de esa entidad, quien argumentó que mantienen las entregas a hospitales, casas de abuelos, entre otros centros, y además a quienes establecen negociaciones con ellos.
Tributan también a la ampliación de capacidades productivas y lo fundamental es que no presenten pérdidas, destacó.
Actualmente cuentan con dos unidades empresariales de base y una minindustria en el municipio Consolación del Sur.
Para nosotros ha sido un paso importante pues la empresa láctea dispone de la infraestructura y gran experiencia de la cual nos valemos para crecer, aseguró Jorge René Hernández, titular de la mediana empresa J&J Sergen.
Aportamos parte de la materia prima para la elaboración de varios productos, dijo. La mayor cantidad, agregó, está destinada al encargo social y el resto la comercializamos.
Tenemos vínculos con la línea del helado, apostamos hace poco tiempo por la elaboración de yogurt y recientemente iniciamos una línea de embutidos que en un primer momento es de hamburguesas. Asimismo, precisó, mantenemos el pan que sí constituye un producto que hacemos por nuestra vía en su totalidad, aunque en áreas del lácteo.
Trabajadores con vasta experiencia perciben las transformaciones de este tipo de colaboración, a partir de las mejoras económicas que reportan cada mes a través de un nuevo sistema de pago.
Nos ha favorecido mucho y estamos muy contentos, porque tenemos un buen salario que está por encima de los siete mil pesos, aseveró Nilda Acosta Travieso, jefa de brigada de la línea de yogurt.
Diariamente producimos cinco toneladas (t), incluso en algunas ocasiones llegamos a siete. Todo ello sin presentar problemas con la materia prima para garantizar la canasta familiar normada, que resulta el eslabón fundamental de la fábrica, apuntó.
Para Odalys Vilaú Iglesias, trabajadora de la línea de paletas de helado, el cambio es perceptible. Presentamos una producción grande de más de tres mil diarias y en estos momentos el aporte es significativo, expresó.
Con anterioridad ganábamos dos mil 300 pesos al mes y ahora todo ha cambiado, alegó.
En función de velar por la calidad, los especialistas evalúan el resultado final de acuerdo con los parámetros establecidos, una práctica habitual.
Cerca de 450 personas se encuentran directamente en la producción en esa industria, fundamental para el aporte de derivados lácteos a la provincia más occidental.
De acuerdo con varios medios, los encadenamientos incluyen a un conjunto de actores económicos asociados en la cadena de valor de un producto, que interactúan entre sí para obtener beneficios en conjunto y aumentar sus niveles de competitividad.