El estudio nacional de seroprevalencia (anticuerpos) y de prevalencia de la COVID-19, en el que participa una muestra representativa de toda la población cubana, ya tuvo un hallazgo en Mantua: una paciente de 34 años que fue confirmada como positiva, se definieron sus contactos y se estudia la fuente de infección.
En el caso pinareño se formó un dúo de especialistas provincial y uno por cada municipio de Pinar del Río, Mantua, Guane y La Palma.
Al frente de la provincia están la doctora Caridad Crespo González, especialista de Higiene y Epidemiología y jefa de Departamento en esa dirección, y la licenciada Mayenny Linares Ríos, metodóloga de Informática de la Universidad de Ciencias Médicas.
En la muestra representativa, explica la doctora, se tasó que fueran 245 personas, con un estimado de tres por vivienda, a razón de cinco viviendas en cada consultorio, lo que equivalía a 80 viviendas y hasta el momento han estudiado a 214 ciudadanos y deben concluir para el próximo día 22.
Para eso se previeron 16 consultorios, divididos en tres de Mantua, cinco de Pinar del Río en tres de sus áreas de salud y cuatro en cada uno de Guane y La Palma.
Esta investigación es la primera de su tipo en la región de las Américas, como parte de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, para profundizar sobre la capacidad de propagación del virus SARS-CoV-2, sus características seroepidemiológicas y la amplitud de la enfermedad, detectada por primera vez en la ciudad china de Wuhan, en diciembre de 2019.
En la red informática de Infomed el doctor en Ciencias Luis Carlos Silva Ayçaguer, experto en técnicas de muestreo, integrante del grupo multidisciplinario que concibió y diseñó la investigación, explica que el estudio de seroprevalencia trata de aquilatar el grado en que ha circulado el virus en la población y se mide la presencia de anticuerpos generados por el organismo una vez que es atacado por el patógeno.
En sus palabras amplía: “Aunque el grado de presencia de anticuerpos implica que se ha conferido inmunidad, esto aún es una incógnita. Hay esperanzas en ese sentido, pues con otros virus similares se ha probado una condición inmunitaria duradera, derivada de la infección previa.
“En tanto, el de prevalencia identifica el grado en que los sujetos tienen la enfermedad en el momento de la medición o la han tenido en los 14 días previos a su aparición en el organismo.
“Aunque se desarrollan en las fases agudas de la epidemia preferiblemente, este es un recurso que vale para cualquier momento, sobre todo si, como es nuestro caso, se va a repetir periódicamente a los mismos sujetos”.
De manera general Cuba realiza una muestra representativa de casi 4 000 personas, residentes en 1 300 viviendas seleccionadas con técnicas aleatorias en 263 consultorios de todo el país.
Y según la misma fuente, la toma de muestras biológicas se extenderá durante 63 días a partir de su comienzo, el 12 de mayo, y se va a repetir periódicamente a los mismos sujetos, cada 21 días, en otras tres ocasiones, y el seguimiento se cerrará el 24 de julio de 2020.