La participación de los jóvenes en el enfrentamiento a la pandemia y en la reanudación del curso escolar centró el debate de la más reciente videoconferencia del Buró Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).
En la cita virtual, a la que estuvieron convocados dirigentes provinciales de la organización, se reconoció que las nuevas generaciones han estado y estarán prestos para asumir los retos que en cada momento se les presente, especialmente este en que la Isla enfrenta un rebrote de la pandemia, informa el periódico Juventud Rebelde.
“La responsabilidad es lo más importante, y hay un elemento imprescindible para ganar la batalla contra la COVID-19 y es la conducta consecuente que asumamos ante cada tarea y situación”, aseguró Diosvany Acosta Abrahante, primer secretario del Comité Nacional de la UJC, quien condujo el encuentro.
Reiteró que hay que cumplir y extremar las medidas contra el nuevo coronavirus, especialmente con la reanudación del período lectivo, pues deben ser fieles defensores de la salud de niños, adolescentes y jóvenes, quienes, como la mayoría de la población, han tenido una participación protagónica y voluntaria en las diferentes tareas encomendadas en esta etapa y merecen continuar sus estudios y preparación.
Sobre el aporte de los pinos nuevos para esta etapa de trabajo, Acosta Abrahante refirió como prioridades, además, el enfrentamiento a la COVID-19, el apoyo a la producción de alimentos, el ahorro de energía y cuanto contribuya a la recuperación económica del país, y la participación en tareas de amplia repercusión y beneficio sociales.
Convocó a aumentar la presencia, influencia y quehacer de la vanguardia política juvenil en las escuelas para contribuir de manera eficaz a la organización, el aprovechamiento y el éxito del curso escolar, y apoyar la Estrategia económica y social del país, tal como lo pidió el presidente cubano Miguel Díaz-Canel, durante un encuentro con las nuevas generaciones en julio último.
Para aquellos territorios que presentan una situación epidemiológica compleja, el Primer Secretario de la UJC destacó que las brigadas Jóvenes por la vida están a disposición de los consejos de defensa provinciales y municipales para cuanto haga falta, sobre todo, en la prevención, enfrentamiento y control de la pandemia.
Igualmente, aseguró que el hogar constituye la base de este combate y pidió que aquellos niños, adolescentes y jóvenes que no pudieron volver a las aulas aprovechen la programación educativa.
Durante la videoconferencia, en voz de sus máximos dirigentes, fue escuchado el sentir de la Organización de Pioneros José Martí, la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media (FEEM) y la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), sobre las principales acciones que desarrollarán para asegurar esta nueva etapa de trabajo.
Como factor común de estas organizaciones, se ratificó la necesidad de adaptar, como la UJC, el funcionamiento de las organizaciones estudiantiles a este nuevo escenario, pero hacerlo con dinamismo, frescura y creatividad.
Se dijo que procesos como el cambio de atributos en los pioneros, la tarea Educando por amor, de la FEU, para ayudar en el déficit de profesores y el proyecto FEEM por Cuba, vinculado a las tareas de impacto económico-social, serán asumidos en espacios más reducidos.
También se habló del aprendizaje de estos meses de lucha, del fortalecimiento en lo ideológico y la certeza de aprovechar los conocimientos para prepararse como los hombres y mujeres que Cuba necesita.
En el caso de La Habana, Ana Rosa Granda Esteban, primera secretaria de la UJC, afirmó que la organización ayudará para que se cumplan con todo rigor las medidas que se establecieron este martes en la ciudad.
En estos casi seis meses de enfrentamiento a la COVID-19 en el país, ha existido la total disposición por las nuevas generaciones para participar en las tareas que se necesite, en este último mes, principalmente, en los centros de aislamiento, de salud y de la ciencia, en el aseguramiento al reinicio del curso escolar y en la producción de alimentos.
En tal sentido, Acosta Abrahante detalló que miles de jóvenes han estado en la zona roja, en las pesquisas activas, en las movilizaciones agrícolas.
Precisó que existe una presencia mayoritaria de jóvenes en la vida económica y en las propias acciones de Salud Pública en el país; “sin embargo, esto implica mayor responsabilidad porque no se pueden tener descuidos, no se pude exponer a la familia, ni a los más vulnerables.
Muchos jóvenes estudiantes, doctores, científicos, obreros, periodistas, campesinos, están desde sus trincheras, construyendo el país, y eso hay que resaltarlo y reconocerle su desempeño, pero también tienen que tomar todas las medidas higiénicas para evitar el contagio con esta enfermedad. Confiamos en esa premisa”, aseveró.