Tras la exposición de las limitaciones actuales con el combustible en Cuba, Alejandro Gil Fernández, vice primer ministro y titular de Economía y Planificación, afirmó hoy que la nación no se paralizará y que se toman las medidas oportunas para afectar lo menos posible a la población y a la actividad económica.
Existen un grupo de restricciones pero el país no está en cero, sentenció al intervenir en el espacio televisivo Mesa Redonda.
Destacó que el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz emitió una instrucción para promover el ahorro en el escenario actual, lo cual significa no dejar de hacer, sino hacer consumiendo menos.
Explicó que esta establece las prioridades en la asignación de combustible para proteger las actividades más importantes y minimizar las afectaciones.
Según Gil Fernández se han desarrollado importantes reuniones de la dirección del país con las autoridades de los territorios, en las que se evaluó, provincia a provincia, la implementación de las medidas y los resultados, lo cual permitió socializar las experiencias.
Resaltó que se implementa el teletrabajo, un mayor control del uso de los equipos del aire condicionado y se aplazan las actividades que no son tan urgentes.
Además de la generación eléctrica, los mayores consumos de diésel en el país corresponden a la actividad agrícola y el transporte, tanto de carga como de pasajeros, aseveró Gil.
En esas actividades no se podrán mantener los mismos niveles de semanas atrás, dijo.
Explicó que se protege la agricultura por la importancia de ese sector para la población, y porque se hizo una buena campaña de siembra, la cual no se puede perder en la cosecha.
Otras prioridades, aún con las limitaciones existentes, son la transportación de pasajeros, los servicios de salud y de los turistas, esto último debido a que se trata de una fuente de ingresos para el país.
También se atiende el bombeo del agua, ya que existe mucho traslado del preciado líquido en pipas y eso consume mucho combustible.
Alertó que habrá afectación en la generación de electricidad, en la actividad económica y en la población, pero en la medida en que exista la capacidad organizativa para cumplir las medidas, estas serán menores.
Puntualizó que se hizo una proyección con los territorios sobre cómo se va a operar en las próximas dos semanas a partir de la disponibilidad de los recursos, lo cual permite buscar alternativas.
Asimismo se han dado facultades a los ministros de determinadas ramas para mover recursos en las actividades de las que son responsables, en aras de que todo lo que tenga prioridad cuente con un respaldo.
Gil Fernández aclaró que las medidas de ahorro son aplicables por igual a todos los actores de la economía: estatales y privados.
Hay que buscar un balance que aporte al ahorro, apuntó el Ministro.