En una exposición colectiva, la obra de cinco equipos de arquitectos cubanos toma el pulso hoy al sueño de construir un Museo de Arte Contemporáneo en Cuba, aspiración vetusta de la cultura en la isla.
Bajo el título Del museo real al museo imaginado, la muestra conjuga el talento de los estudios Choy-León, U+D Arquitectura, A.R.O, AD Urbis, H(R)G_Arquitectura, Apropia y D Cero, desde el Museo Nacional de Bellas Artes.
Según informa la institución, la exhibición contará con Felipe Dulzaides como invitado de lujo, en tanto aboga por «el concepto de que el primer objeto museable es su propia arquitectura; la cual jugará un papel destacado en el contexto urbano».
Asimismo, el texto destaca «la concepción plural de los proyectos», en coherencia con los lenguajes estéticos actuales, sin obviar los «desafíos y controversias» sobre la arquitectura de espectáculo asociada a los grandes museos.
Aspiración de artistas, gestores, curadores, instituciones y la ciudadanía, el Museo de Arte Contemporáneo de La Habana lleva impreso el designio de mostrar el valor de la edificación como dinamizadora del contexto en el cual se ubique a la par de su finalidad como reservorio de arte.
En tanto, la exposición reconoce la labor del arquitecto como creador y destaca la urgencia de devolverle a esta disciplina su lugar histórico, como madre de todas las artes, apunta el texto, que resalta un espacio dedicado a las Escuelas de Arte.
De igual forma, la muestra constituye un llamado de atención «para no abandonar la voluntad imperiosa que tenemos de crear el Museo», pues el contexto indica que este tema es una necesidad impostergable.
