“El cantor del pueblo nos ha dado su último adiós con una nota musical fuera de su inolvidable pentagrama” así comienza el comentario en el perfil institucional de la casa de Cultura del municipio San Luis, por el deceso de uno de los hijos de su tierra, José Antonio Villafranca Venero.
Villafranca, inició su carrera musical en el conjunto Favorito; considerada uno de las agrupaciones más importantes de Vueltabajo, junto al Edén Pinareño y al conjunto Artemiseño.
Fue la figura principal de los espectáculos artísticos que se ofrecían en el cabaré El Criollo en la ciudad Pinar del Río. Admirado por su presencia y elegancia al vestir, su excelente comunicación con el auditorio, el color de su voz, tesitura, movimiento escénico, dicción e interpretación. Seleccionaba el repertorio acorde a sus condiciones interpretativas y los temas más conocidos de la época; con el acompañamiento de la orquesta Metropolitana, dirigida al principio por el maestro Nico Rubalcaba, era capaz de llenar los espectáculos.
En el transcurso de su vida artística, José Antonio, participó en varios Festivales de la Toronja en el municipio Isla de la Juventud, y en los concursos del Creador Musical que se desarrollaban en la provincia pinareña -certamen que sería la antesala del conocido concurso de interpretación Pedro Junco.
Entre sus reconocimientos consta, el tercer lugar en el primer festival nacional de música contemporánea Benny More, de 1980, en Cienfuegos. Fue intérprete de los espectáculos de Rancho Club- El Río, y antes de su jubilación del sector profesional se presentaba en el Hotel Acogedor del municipio San Luis.
José Antonio Villafranca Venero, el señor de la voz de oro y la sonrisa alegre de su natal San Luis, falleció este 28 de febrero, a la edad de 79 años.
Siempre he pensado lo honorable que resulta recordar, homenajear a quienes en su vida y su destaque, nos han acompañado. Mis condolencias por la desaparición física de este cantos sanluisero.
En honor a la verdad comparto esta idea y aprovechó la oportunidad por la ausencia de merecidos homenajes, que con todo respeto y por lo general se circunscriben a Pedro Junco, y olvidan figuras pinareños de extraordinario calibre y sin iconos de los andares pinareños en la música cubana, me referiré a:
El niño Rivera. Todo y más de lo que se diga sobre su obra, de este modesto y excelente músico es poco.
Algún musicólogo decía…» Si el niño Rivera no hubiera nacido, habría que intentarlo»… Es corto, muy corto el espacio para hablar de él.
Y me pregunto que hace que no tengamos un evento, que le homenajee.
El niño, a los cinco años tocaba el futuro con el Septeto Caridad. Se esa ciudad, y ya a los ocho o nueve años prácticamente lo dirigía.
Su obra musical, es enorme. Recuerdo les hombre que con sus tres tocaba filin, hacia arreglos orquestales en los primeros años de su vida para el Conjunto Casino.
Otro icono Virgilio González Solar, se recuerdan de; La Ola Marina, Clara, Rompe Saraguey???. Natural de San Luis, en mi opinión hombre para hacer un monumento.
José Antonio Fajardo, es verdad que se marchó a final de los sesenta o principio de los setenta, de Guane. Y se le recuerda Fajardo y sus Estrellas; ritmo de pollos, pachanga etcc.
José Ramón Sanchez, el madrugador, ni una frase. Su tomada campesina exquisita.
Rafael López Hernández. Excelente músico, natural de Bahía Honda, creo por suerte en su pueblo natal, existe un museo. Mundialmente famoso por La Sitiera
Enrique Jorrin, mucho que decir de este. Natural de Candelaria
Con larguisima historia musical.
No mencionó a Miguelito Cuni, quien por suerte tiene ahí un centro que lleva su nombre.
Miguelito y el niño estuvieron como músicos bien cerca.
Gracias