Una donación de más de 200 metros cúbicos de material sanitario partió hoy desde la ciudad italiana de Milán hacia Cuba en gesto solidario para ayudar a enfrentar la pandemia de la Covid-19.
La Agencia para el Intercambio Cultural y Económico con Cuba (Aicec) fue la promotora principal y coordinadora de la iniciativa ‘Poniéndole Corazón a Cuba’, a la cual se sumó, con su propia campaña, la Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), la mayor y más antigua central sindical del país.
Un comunicado de la embajada de Cuba en Italia destacó también la participación de la Coordinadora Nacional de Cubanos Residentes en este país (Conaci), la Asociación Nacional de Amistad Italia-Cuba (Anaic), el Gobierno regional de Piamonte, la Comunidad de San Egidio y la Asociación La Villeta por Cuba.
Además, la Plataforma Articulada para el Desarrollo Integral Territorial del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, la Asociación Recreativa y Cultural Italiana de Umbría, Nuestra América-Capítulo Italiano de la Red en Defensa de la Humanidad y la organización juvenil Cambiando de Ruta, entre otros.
El donativo, compuesto por fármacos, equipos y material médico y cuyo valor estimado es de alrededor de un millón y medio de euros, será destinado, fundamentalmente, a centros hospitalarios de La Habana, Matanzas, Holguín, Cienfuegos, Santiago de Cuba, Guantánamo y Ciego de Ávila.
Poco antes de la salida del vuelo de la aerolínea Neos, representantes de entidades que contribuyeron a la campaña ofrecieron declaraciones en el aeropuerto internacional de Malpensa, en un breve acto conducido por Michele Curto, presidente de la Aicec.
Al intervenir, el embajador, José Carlos Rodríguez, agradeció a los participantes en la donación, la cual describió como ‘una gran carga de amor y solidaridad al pueblo cubano que enfrenta la pandemia de la Covid-19, en medio del criminal bloqueo de EE.UU’.
Rodríguez añadió que Cuba vencerá, como lo demostró en otros momentos difíciles de su historia, a pesar de la compleja situación actual, marcada por un pico en la pandemia, el reforzamiento del bloqueo y el fuerte impacto de ambos factores en la economía y sociedad cubanas.
El pueblo cubano resistirá y sabrá sobreponerse a las dificultades. Los desafíos que afronta Cuba no son sólo de los cubanos, sino de todos los que comparten el ideal de un mundo mejor, subrayó.
En la despedida de la carga hablaron también Susanna Camusso, responsable de Política Europea y Relaciones Internacionales de la CGIL, Manuela Dogliotti, de la Comunidad San Egidio y Niurka Bertha Pico, en representación de Conaci, entre otros.
Asimismo, representantes del Círculo de Trento de la Anaic, de la Asociación AsiCubaUmbría y del Capítulo Italiano de la Red en Defensa de la Humanidad.