A la explanada de La Punta volverán hoy el estudiantado y los jóvenes cubanos, para honrar a los mártires del 27 de noviembre y reafirmar el sagrado compromiso con Cuba y su historia, la Revolución y el porvenir.
No marchará esta vez la muchachada San Lázaro abajo, desde la Colina Universitaria, las restricciones que impone la pandemia no lo permiten, pero igual una representación de los “pinos nuevos” se dará cita ante el monumento a los ocho estudiantes asesinados por el colonialismo español 149 años atrás, para rendirles tributo.
Este es de esos días para alzar las voces y juntar las almas, el 27 de noviembre es historia viva, un perenne recordatorio, una fecha que sigue doliendo y convocando a la acción y al repudio de ese y todos los crímenes que a diario se cometen en el mundo, afirmó a la ACN Pedro Luís Zacarías, miembro del Secretariado Nacional de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU).
Sencillo, pero sentido será el homenaje a Alonso Álvarez, Carlos de la Torre, Pascual Rodríguez, Eladio González, Ángel Laborde, Anacleto Bermúdez, José de Marcos Medina y Carlos Verdugo, al pie del monumento erigido en el lugar donde fueron fusilados esos ocho mártires casi adolescentes, la tarde de aquel aciago día.
Con flores y encendidas palabras y el amor hecho verso y canción, serán recordados al atardecer en La Punta, allí donde durante todo el día estudiantes de Ciencias Médicas realizarán guardias de honor.
Será el cierre de una jornada, que alcanzará a universidades y otros escenarios de toda Cuba y que en La Habana llevará al estudiantado hasta el mausoleo en la necrópolis Cristóbal Colón, donde reposan los restos de esos ocho eternos condiscípulos, símbolos imperecederos de siglos de rebeldía, luchas y sueños.
También en la capital y por la mañana, pero en la acera de El Louvre, la juventud estudiosa viajará a la raíz de la mano de especialistas de la Oficina del Historiador de la Ciudad, para revivir el ambiente, la tensión y los sucesos mismos, antes, durante y después del 27 de noviembre de 1871.