LA CAPITALINA cubana Milaymi Marín (76 kg), medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024, fue la figura de mayor linaje en la Gala Nacional de Luchas Pedro Val en Memoriam, desarrollada en el Coliseo de la Ciudad Deportiva.
Sin mayores contratiempos, Marín, de 23 años, se impuso en su combate de los 76 kilogramos por superioridad técnica sobre la experimentada Mabelkis Capote, para cerrar con éxito el año 2024.
«Ha sido un año exitoso, en el que mi principal resultado fue aquella codiciada medalla de bronce en París, un sueño para cualquier deportista y una meta que me había trazado desde que logré la clasificación. Tuve un año de preparación intenso y supe aprovecharlo», comentó Marín en exclusiva con JIT.
Interrogada sobre la excelente musculatura que posee actualmente –de hecho, llegó a la selección bastante delgada–, explicó que necesitaba mejorar su fuerza para poder competir exitosamente a nivel internacional contra rivales de físicos imponentes en su división.
«Te obligan a ser consciente de lo que debes hacer en todos los aspectos, tanto técnicos como físicos. Y mi profesor Filiberto Delgado ha aumentado mis niveles de fuerza en los entrenamientos», explicó la gladiadora.
«Mi entrenador ha sabido equilibrar la preparación para trabajar la fuerza y mantener la velocidad, que es mi principal arma con la que saco ventaja en el peleas», aseveró.
Marín explicó que en divisiones altas como la suya, se puede ver la pelea con una postura más parada, similar al estilo grecorromano y es vital aplicar velocidad en la lona, sobre todo en busca del tackle a las piernas.
Además, confesó que este excelente año le motiva a prepararse mucho mejor para afrontar los objetivos de la próxima temporada, en la que pretende incluirse en el podio del campeonato mundial.
Ella es un ejemplo de entrega y de nunca renunciar a los sueños. En el año 2023 sufrió una grave lesión en los ojos mientras entrenaba. Pero pudo recuperarse y seguir con su buen paso sobre los colchones, quizás porque sabía que estaba destinada a aplicar sus tacleadas rápidas y pases hacia atrás. Así que ¡Enhorabuena a Marín!