La empresa agropecuaria Cubaquivir del municipio de Los Palacios fomenta el cultivo de ají picante y ha exportado hasta la fecha más de dos toneladas, a pesar de las dificultades con la transportación aérea a causa de la COVID-19.
Con un plan de expedición de 10 toneladas para el 2021, dedican 0.27 hectáreas para la cosecha de la variedad chile habanero en módulos de cultivo protegido, aunque actualmente algunos campesinos realizan la labranza al descubierto para incrementar los volúmenes de producción.
Según Osvaldo Acosta Moreno, especialista de comercialización de la Empresa, los principales destinos son Europa y Canadá, pero este año la frecuencia de los vuelos ha sido menor, por lo que han destinado alrededor de una tonelada a la industria.
“El ají es de excelente calidad. Una tonelada oscila entre 54 000 y 58 000 pesos. Este año se han cancelado muchos vuelos desde Europa, pero lo que no hemos exportado lo destinamos a La Conchita para la elaboración de salsas y pastas”, refirió.
A pesar de las dificultades, el plan de exportaciones hasta el mes de febrero se ha cumplido. Han logrado tres ciclos de producción desde que comenzaron a incursionar en este cultivo y están sobre la media del país con un rendimiento de entre 43 y 45 toneladas por hectárea.
Manuel Seruto López, director de la UEB Casas de Cultivo de Cubaquivir, aseguró que aunque han optado por buscar alternativas como la del ají para ingresar divisas, el objetivo es obtener producciones de hortalizas frescas durante todo el año para satisfacer la demanda del turismo y también abastecer los mercados.
“Contamos con 12 casas de cultivo, cinco de ellas destinadas al ají picante, el resto se oscila entre tomate y pepino que tributamos a los mercados agropecuarios estatales. En este módulo mayormente trabajan mujeres, aunque se han sumado algunos hombres”, dijo.
Refirió el directivo que en términos de exportación una tonelada de chile habanero tiene un precio de 2 300 USD y en lo que va de año han dejado de exportar más de una tonelada, lo que demuestra el impacto negativo que la pandemia ha causado a sus producciones.
Añadió que para iniciar con la cosecha de ají picante recibieron capacitación en provincias con más experiencia como Cienfuegos y Ciego de Ávila. El año pasado sobrecumplieron el plan de este rubro con 8,1 toneladas de un plan de 6,5.