Los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos agregaron este viernes seis nuevos síntomas asociados con el coronavirus a su lista oficial, llevando el total a nueve.
Hasta el momento la organización estatal sólo asociaba a la fiebre, la tos y falta de aire con el COVID-19, pero tras notar “una amplia gama de síntomas” reportados entre los pacientes, ha decidido ampliar la lista que publica en su página web.
Los nuevos síntomas son escalofríos, temblores, dolores musculares, dolor de cabeza, dolor de garganta y pérdida abrupta del sentido del olfato o el gusto.
Estos pueden aparecer a partir de los dos días desde el primer contacto con el virus, y hasta 14 días después.
Aunque todos los síntomas deben ser monitoreados de cerca al aparecer, los CDC advierten que se debe buscar atención médica inmediatamente cuando aparezcan las siguientes señales de emergencia: problemas para respirar, persistente dolor o presión en el pecho, incapacidad para despertar o presentar labios azules.
Hay también otros síntomas asociados con el coronavirus pero que no han sido oficializados como tales. Entre ellos se encuentra la diarrea, erupciones en la piel, congestión nasal y fatiga.
De acuerdo al conteo realizado por la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos se han confirmado unos 880.000 casos y registrados más de 50.000 muertes.
Casi todos los síntomas designados oficialmente por la CDC han sido detectados ya por los especialistas y se encontraban en la lista confeccionada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), excepto por los temblores y los escalofríos que parecen ser una novedad.
Para la OMS, los síntomas más comunes son fiebre, tos y cansancio. Otras personas sufren falta de aire, dolores musculares y dolor de garganta. Y un número reducido de pacientes sufren diarrea, náuseas y congestión nasal.
Con respecto a las precauciones ante la aparición de éstos, el organismo internacional recomienda a quienes sufran síntomas leves y se encuentran en buen estado de salud que se autoaislen y contacten a su médico de cabecera a una línea de información estatal sobre el COVID-19.
Quienes presenten fiebre, tos o dificultad para respirar, en cambio, deben buscar atención médica.