La gimnasia artística y rítmica en Pinar del Río es uno de los deportes más perjudicados por el bloqueo económico y financiero de los Estados Unidos a Cuba. Falta de condiciones, escasez de insumos y limitaciones con la importación de implementos son algunas de las múltiples causas que dañan el desarrollo de una disciplina que vivió mejores tiempos en la provincia.
La pequeña Daniela Pino Monterrey, comenta con pesar que hoy no están todas las condiciones creadas para poder cumplir su sueño, representar a Cuba en unos juegos internacionales.
“El tapiz no tiene las características que debería tener. Algunas tablas se están hundiendo, otros atletas se han lesionado. El problema es que de tanto brincar, esas tablas ya no aguantan y se están levantando, por lo cual se dificulta hacer algunos ejercicios en el tapiz, pero igual lo hacemos, porque nosotros no podemos dejar de practicar, queremos ser campeonas, y para ello hay que esforzarse”.
Keyla Rocío Santamarina, apenas rebasa los 10 años, pero da saltos y hace muchas piruetas como si hubiera nacido en un colchón o caballo de saltos. Su profesora, Aida Rosa Acosta Hernández, la observa desde lejos, al tiempo que corrige algunas deformaciones en la ejecución de la técnica.
“Imagínate lo caro que es este deporte y lo que nos perjudica el bloqueo, que todo lo de gimnasia rítmica cuesta, hoy por hoy, entre 30, 50 y hasta 70 dólares estadounidense. No todas las niñas pueden costearlo. Cuando hablo de la vestimenta de la rítmica, es lo mismo para la vestimenta de la artística. Realmente es muy caro todo y difícil de adquirir”.
Pese a las limitaciones actuales, atletas, familiares y entrenadores se empeñan en devolverle a Vueltabajo las alegrías de antaño con la práctica de esta importante disciplina deportiva. Hoy la mayor dificultad, según esta docente, está en la adquisición de estos implementos.
“Para nuestras competencias, la Eide de Pinar del Río no puede darnos almuerzo. Ellos nos garantizan algo, pero la mayor parte viene del aporte que hacen los padres”, refiere con pesar la pequeña Keyla.
Por su parte, la profe Aida Rosa enfatiza en lo difícil de adquirir todo, de ahí que, sin la familia, muy poco se pudiera conseguir.
“Los padres nos ayudan con todo lo que tiene que ver con las licras, los monos. Con los aparatos no pueden hacer nada, porque no tienen de dónde sacarlos, pero su apoyo es decisivo”.
Aida Rosa Acosta, la profesora que entrena a Kayla, a Daniela, a Melody y a las otras muchachas, no puede contar con todos los recursos, pero nadie ha podido arrebatarle esas alegrías y el conocimiento que hacen saltar obstáculos cuando otros solo ven imposibles.
“Fui a Venezuela, traje cuerdas, pelotas, otros equipos. Pude ayudar, pero todo se acaba, todo se rompe, las pelotas se nos poncharon. No contamos con los medios necesarios como para remendar las cosas, no tenemos cinta y todo es muy difícil porque estos aparatos de la artística y la rítmica son muy costosos”.
¿Cuánto se puede hacer desde la escuela? ¿Cuánto falta aún por recorrer para que nuestros atletas y el colectivo técnico no tengan que sufrir tan crudamente este bloqueo económico con los recursos internos que aún nos quedan?
“La escuela nos ha ayudado muy poco, ya que no hay presupuesto. Cada vez que contamos con ellos para que nos ayuden en algo, nos paguen los vestuarios, nos dicen que no.
Hasta donde está el director de la EIDE pinareña Ramón Luis García llegó Guerrillero en busca de explicaciones sobre el tema.
¿Cuánto ha utilizado del presupuesto que está destinado para la compra de implementos deportivos en este deporte específicamente?
“Muy poco la verdad. Lo poco que hay se ha destinado a la reparación de los locales, los mayos de los atletas y el tapiz, que está seriamente dañado. En el caso de la gimnasia, en este momento no se ha comprado ningún implemento”.
Si bien es cierto que el bloqueo económico, financiero y comercial de los Estados Unidos a Cuba es hoy el mayor impedimento para echar a andar un deporte que necesita nuestro país en los eventos múltiples, también valdría la pena analizar la repartición de los recursos necesarios, la inversión que, verdaderamente, se necesita para que el deporte pinareño se mantenga en la elite de Cuba, en una disciplina que aporta muchas medallas en eventos internacionales.