Pinar del Río, provincia mayor productora de tabaco en Cuba, concluyó el proceso de contratación con los productores, de las 16 mil 373 hectáreas (ha) previstas a sembrar en la venidera campaña, cuyos preparativos están en marcha en el occidental territorio.
De esa cifra, las mayores áreas se centran en los municipios de San Juan y Martínez, San Luis, Pinar del Río y Consolación del Sur, que integran el llamado macizo tabacalero.
Con la finalidad de practicar siembras tempranas, desde ahora se acomete la preparación de los terrenos que acogerán a los semilleros tradicionales, tarea que se viene cumpliendo sin dificultad, al igual que las labores de cruce, en tanto se procede a la limpieza de túneles para semilleros tecnificados, tras utilizarse en la producción de hortalizas.
Simultáneamente los cosecheros ponen énfasis en las acciones de mejoramiento de los suelos, de gran repercusión en el rendimiento del cultivo, emblemático de Vueltabajo.
De manera paralela, prosigue la zafadura de tabaco, avanza el acopio, que continuará durante todo el mes de julio y el venidero agosto, mientras en las escogidas se agiliza el beneficio de las hojas, que marcha a buen ritmo, de acuerdo con declaraciones de Virginio Morales Novo, especialista agrícola del grupo Tabacuba.
Optimista, comentó el buen reporte hasta julio 10 de las capas –hojas que revisten a los afamados habanos– al obtenerse 39,3 toneladas (t) superior a lo previsto para esa fecha, y continúa la selección.
Se mantienen activas y cumpliendo los protocolos sanitarios de cara a la prevención de la pandemia, 93 escogidas y nueve miniescogidas, las cuales proporcionan empleo a dos mil 364 operarios, precisó.
Con lentitud marcha la construcción de nuevos aposentos para la cura natural del tabaco, aunque hay terminados 240, otros están en diferentes etapas de edificación y en la medida que comiencen a llegar los elementos de techo, la tarea se agilizará.
A pesar de la complejidad de la recién finalizada cosecha 2020-2021, debido a inconveniencias climáticas y al rudo bloqueo norteamericano, los vegueros pinareños, con reconocida experiencia en la labranza, aplicaron alternativas y lograron una buena contienda, en la que recolectaron más de 24 millones 600 mil cujes de tabaco.
Pinar del Río garantiza a la industria del torcido la totalidad de los capotes, tripas y volúmenes de las llamadas capas exportables.