Son miles los sonidos que se esconden en el universo, esperando a ser escuchados. Los más apreciados son los producidos por la naturaleza, esos que nos llenan de una paz interior incomparable y trasladan hacia un estado de relajación mental que nos hace olvidar los problemas.
Lamentablemente en la actualidad, con la contaminación sonora creciendo por día, esos momentos de tranquilidad se van perdiendo, y solo adentrándonos en los extensos campos, selvas tropicales o en la profunidad de los mares, podremos admirar la verdadera voz de la naturaleza.
Hoy deleitaremos a tu oído con uno de los sonidos más mágicos y raros del mundo.
Las mariposas son animales bien conocidos por todos. Atraen por sus colores, elegancia al volar y su fuerte fragilidad. Pero de seguro no te has detenido a pensar o escuchar en cómo suena sus alas al revolotear.
El entomólogo tropical y Youtuber Phil Torres publicó recientemente un video que muestra un momento único: el despegue de millones de mariposas monarcas que emprenden vuelo tras el invierno. Es, sin dudas, un espectáculo visual, pero también sonoro.
Alrededor de 140 millones de monarcas emigran desde Canadá y Estados Unidos hasta la Reserva de la Sierra Chincua, en el estado de Michoacán, México, para protegerse de los meses más fríos. Es considerada una de las migraciones animales más grandes, pues viajan hasta 4500 kilómetros en un viaje de ida y vuelta.
El lugar es conocido además con el nombre de “Santuario de la mariposa monarca” y alberga sin dudas un tesoro natural que debe ser preservado.
Al mover sus alas, los millones de mariposas, todas al mismo tiempo, emiten un sonido que se asemeja al del agua, como si estuviéramos escuchando una cascada al caer o el paso de un río.
Sin dudas la naturaleza tiene una magia que no deja de sorprendernos. Deleita todos nuestros sentidos y nos transmite sensaciones de placer que no encontramos en ningún otro lugar. Esperemos que los seres humanos recapaciten sobre la necesidad de protegerla y preservarla. Su futuro y el nuestro, depende de ello. Así, tesoros como este podrán ser admirados de generación en generación.