El diseño por médicos cubanos de un craneótomo, empleado en intervenciones intracraneales en edades pediátricas, contribuye hoy a paliar los perjuicios ocasionados en los servicios asistenciales de Cuba por el bloqueo de Estados Unidos.
El desarrollo de la herramienta, cuyo fin es facilitar el acceso a la cavidad craneana y llegar hasta el cerebro sin riesgo para el paciente, fue posible gracias al uso de un motor eléctrico pequeño y de alta velocidad, al que le fue adicionado un complemento que permite taladrar el hueso, declaró al diario Granma una de sus gestores.
Según afirmó el doctor Ángel Camacho, neurocirujano del hospital pediátrico José Luis Miranda, de la central Villa Clara, dicho instrumento, que facilitó las cirugías a más de 400 niños de la región central de Cuba, es el más empleado en la neurocirugía pediátrica pues cerca del 90 por ciento de las intervenciones vinculadas con esa especialidad son intracraneales.
Asimismo, refirió la fuente, la creación de una extensión al mismo equipo permite operar a pequeños menores de un año que sufren enfermedades muy frecuentes como la craneosinostosis, un defecto de nacimiento en el cual los huesos del cráneo se cierran prematuramente.
Camacho aseguró que, hasta la fecha, menores de la región central desde Matanzas hasta Ciego de Ávila han sido beneficiados gracias a la innovación.
Los servicios sanitarios en Cuba constituyen uno de los más afectados por el bloqueo que por más de 60 mantiene Estados Unidos contra la isla.
Acorde con cifras divulgadas recientemente por el Ministerio de Salud Pública, solo entre abril de 2018 a marzo de 2019, el daño ascendió a 104 millones 148 mil 178 dólares, cifra que supera en seis millones 123 mil 498 dólares a la del año anterior.