El déficit de recursos materiales, problemas organizativos, insuficiente disponibilidad de fuerza laboral calificada y falta de motivación de las familias para sumarse a la construcción de viviendas, son algunos de los elementos que inciden en que al cierre de octubre este programa solo cumpla con el 41, 6 por ciento de lo planificado.
Pinar del Río, Los Palacios, Mantua y Viñales son los municipios que presentan los mayores atrasos en ejecución, pese a que este programa tiene una gran incidencia en el territorio por el daño acumulado en el fondo habitacional y hay damnificados de huracanes que llevan casi dos décadas aguardando por sus moradas.
De las 2 150 previstas para el presente año, hasta el 31 de octubre se concluyeron 896, de las que pertenecen al plan estatal 322, lo que representa el 44 por ciento; 156 se construyeron con respaldo de subsidios y 418 por esfuerzo propio.
Cemento, acero, techos y carpintería son recursos cuya carencia impide avanzar más en este programa; aunque hay otros males achacables a las debilidades en el funcionamiento de los puestos de dirección municipales de la Vivienda.
Pese al adverso escenario epidemiológico y económico, la provincia aumentó la producción local de materiales para la construcción, pero se precisa diversificar los surtidos.