El nasobuco o mascarilla, devenido pieza imprescindible de protección frente a la Covid-19, también resulta útil para evitar los efectos adversos de la nube de polvo del Sahara que desde hoy afectará al territorio de Cuba.
Así lo recomendó en conferencia de prensa el director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, Francisco Durán, quien sostuvo que varias de las medidas de resguardo ante el coronavirus SARS-CoV-2 son válidas ante la eventualidad climatológica.
Desde este martes y hasta el viernes una nube de polvo del Sahara estará afectando todo el territorio nacional, con un aire seco que puede provocar síntomas similares a una gripe, principalmente en personas alérgicas o asmáticas.
Entre las molestias descritas se encuentran la tos, la irritación en los ojos y el malestar en la garganta, entre otras manifestaciones catarrales.
Para protegernos, explicó Durán, resulta de gran utilidad el uso del nasobuco y también permanecer en las casas, tal como se ha hecho para evitar la propagación de la Covid-19.
En la rueda de prensa dirigida a ofrecer datos actualizados sobre la situación de la isla frente al nuevo coronavirus, el alto funcionario informó que ayer se diagnosticaron tres nuevos casos de la enfermedad, para un total de dos mil 318.
Asimismo, no se registraron fallecidos, por lo que la cifra se mantiene en 85, y se otorgaron 10 altas médicas, para un acumulado de dos mil 123 recuperados.
Por otro lado, Durán se refirió al tema de las fases en la etapa de recuperación y precisó que el avance de los territorios depende de la evolución del panorama en cada localidad, lo cual es analizado por las principales autoridades del país.
Con este objetivo, detalló, se estableció un grupo de cinco indicadores que incluye la tasa de incidencia de casos confirmados en los últimos 15 días, el por ciento de casos activos y la existencia de eventos de transmisión local.
‘No es que estos indicadores deban estar en cero, sino que cumplan determinados niveles y presenten una evolución favorable’, señaló.
Otro tema abordado fue el de las investigaciones internacionales que muestran una propensión de las personas con sangre tipo A a adquirir la Covid-19 con mayor facilidad y a presentar complicaciones.
El especialista indicó que en Cuba el comportamiento de ese factor se está estudiando como parte de una vasta investigación llevada a cabo por especialistas en genética médica para recoger una amplia información sobre las personas que han presentado la enfermedad.
Además de la cuestión de la sangre, el estudio también indaga en otros ámbitos como el tema racial y los resultados se harán públicos una vez concluida la investigación, anotó.