Incrementar la accesibilidad de la población a las producciones es uno de los principios básicos del programa de seguridad alimentaria, por lo que dentro de las 63 medidas aprobadas para el sector agropecuario se concedió preponderancia a la flexibilización de la comercialización.
Al amparo de estas disposiciones, la Empresa de Acopio y Beneficio de Tabaco (ABT) San Luis impulsa a campesinos destacados y cooperativas a que arrienden placitas y mercados del municipio, lo que incide favorablemente sobre el incremento y diversidad de las ofertas.
PIONEROS
Alberto Delgado, vicepresidente de la cooperativa de créditos y servicios (CCS) Eusebio González, está a cargo del punto de venta enclavado en la comunidad El Paradero en las afueras del poblado y destaca que los campesinos están muy contentos porque reciben el pago inmediato y eso es uno de los viejos reclamos que ahora encuentran solución.
Establecieron contratos con entidades pertenecientes a los ministerios de la Industria Alimentaria (Minal) y de la Agricultura (Minag), así como con trabajadores no estatales lo que les permite ofertar conservas, cárnicos y huevos, además de las producciones propias.
Leovaldo Crespo es productor de la CCS Mariana Grajales. Él, que tradicionalmente asume en cada campaña tabacalera la siembra de semilleros, por estos días lleva simultáneamente el cuidado de posturas y el manejo del punto de venta ubicado en el núcleo urbano de la cabecera municipal.
Desde el siete de agosto es el arrendador de un local de la Empresa de Acopio y cataloga la experiencia de buena. Asegura que lucha para mantener la gama de ofertas con sus cosechas y la de los socios de la cooperativa, además de que tiene contratos con otros proveedores.
Confía en que en la medida que se incorporen otras estructuras puedan bajar los precios y como elemento significativo señala que al menos no se han incrementado.
LA EMPRESA
José Ángel Ortega Hernández, director de la empresa ABT San Luis, explica que la entidad les ofrece acompañamiento en la reparación de los locales arrendados para que también muestren una imagen atractiva y que responda a los requisitos higiénicos necesarios.
En el municipio ya hay nueve puntos de venta a cargo del sector campesino y cooperativo, otros dos se encuentran en trámites y la intención es seguir ampliándolos.
Como entidad alquilaron un mercado agropecuario estatal (MAE) en la ciudad de Pinar del Río en el consejo popular Ceferino Fernández y el aprovisionamiento del mismo está a cargo de la unidad empresarial de base de Aseguramiento, que también asumirá el del kilómetro tres en la carretera a La Coloma, a inaugurarse el próximo 10 de octubre, y tienen interés en asumir un tercero.
Resalta que desde que recibieron la capacitación con las 13 medidas que tendrían aplicación inmediata pensó en que la flexibilización de la comercialización era de las que con mayor rapidez podrían implementar y confiaba en el impacto sobre la población.
BENEFICIARIOS
Yemilé Padilla reside en la comunidad El Paradero y comenta que el punto de venta antes no tenía nada y ahora está bien surtido. Así se ha mantenido desde que abrió bajo la administración de la CCS Eusebio González y los exhorta a que sigan así, porque para los habitantes de la demarcación es una facilidad poder adquirir ahí mismo los productos frescos y con calidad.
Criterios similares tienen los clientes del local que regenta Crespo.
“Esto le resuelve muchas necesidades a la población”, expresó Ileana León, quien vive en la cabecera municipal y acota que esas opciones no estaban disponibles hasta hace poco.
Por otra parte, la sanluiseña Dayelis Vargas destacó el horario, pues ella, que es maestra, a veces termina a las cinco y como permanece abierto hasta las seis tiene tiempo para hacer sus compras. Asimismo, resaltó que productos como el ajo solo podía adquirirlo con los particulares y ahora los expenden en la placita.
LUCES Y SOMBRAS
Es loable lo que han conseguido con la vinculación directa de los productores a la comercialización, pues al menos hasta el momento ganan en estabilidad y gama de ofertas.
Sin embargo, aunque es muy positivo que se ofrezcan elaboraciones industriales, es importante no perder de vista que sean protagonistas las cosechas, porque de lo contrario se malograría el propósito de reducir la presencia de terceros incrementando tarifas sin que estas tengan un respaldo más allá de la acción de compra y venta.
Es la ley de oferta y demanda, no de ordeno, tengo y mando, y ahí la Empresa puede desempeñar un rol regulador a partir del dominio de la existencia de cultivos, los picos productivos y otros elementos a tener en cuenta.
Es un significativo paso de avance, pero consolidarlo y buscar que la accesibilidad económica se materialice son metas en las que San Luis está en condiciones de poner la mirada, sin duda una muestra de que las 63 medidas, bien implementadas, son un estímulo para la producción y comercialización de alimentos.